Carlyle salia cerca de las 7:30 de la mañana todos los días hace 4 meses, pasaba al café para tener un poco de cafeína y antu le decía como había estado el trabajo el día anterior, realmente ella se había acostumbrado al relajado itinerario de tener a su jefe todos los días ahí pero actualmente eso cambió, desde que jaaz renunció, pasó algunos meses sin siquiera aparecer, lora iba y le contaba que, aunque estaban molestos con el alfa, se turnaban para sacarlo de su casa.
Sus madres eran quienes pasaban al café para saber sobre el trabajo y funcionamiento del local porque sabían que ese café, había sido exclusivamente creado para jaaz, debían cuidarlo.
Todos mantenían la esperanza de que jaaz regresará.
Luego de pasar al café, conducía con su café matutino, negro y sin azúcar con u leve aroma que le recordaba a jaaz, producto del aniz, llegaba a la oficina que camelia le había destinado y comenzaba a trabajar.
Incialmente se dedico a revisar futuros proyectos y analizar si eran buenos o malos, ahora estaba a cargo de una planta ejecutiva completa y eso ocupaba todo su día hasta pasadas las 18 hrs. Para luego solo regresar a casa, darse una ducha y dormir hasta comenzar nuevamente.
Su escape eran las visitas de los amigos de jaaz y dalton, escaparse a mejorar y supervisar la casa que estaba construyendo.
—vamos a almorzar—rocío azotó su escritorio. —hoy me dijeron algo interesante y quiero hablar contigo.
Carlyle con lo último despegó la vista de los documentos y por fin dio toda su atención.
—bien...—le informo a su secretaria que no almorzara en la empresa y se fue
Salieron de la empresa cerca de las 13 hrs. Fueron al restaurante más cercano, hoy era viernes y el alfa quería retirarse temprano para ir al terreno de la construcción. Su mamá parecía haber hecho temprano una reservación.
—Quiero el plato del día y vino blanco, el que sea.—dijo la mujer. —¿haz sabido algo de jaaz?
—no, ¿por qué la pregunta?
—iré directo al grano, jaaz va a regresar, no sé cuándo pero me enteré que volcia por su padre, y en la empresa están corriendo rumores que no me gustan.
—¿rumores?
—Rumores lyle, sabes que nosotrqs nunca elegiríamos pareja para ti, eso está fuera de discusión pero... A menos que nos digas que ya no tendrás nada con jaaz vamos a seguir pensando lo mismo. Jaaz es la única pareja que nosotras aprobamos.
—alto ahí, no entiendo nada de lo que estas diciendo, jaaz es mi única pareja.
—Bueno, dejame ser más clara, bernardo nos dijo que tu secretaria ha estado haciendo correr muchos rumores, sobre todo diciendo que la llevaste a la casa de jaaz.
—claro, la lleve porque ella es útil cuando hablo con el contratista para llevar cuenta de lo que quiero hacer.
—bien, ella dio a entender que estas construyendo una casa para la persona que quieres y que esa persona es ella, incluso dijo que le distes la clave de ingreso en tu apartamento y que la invitaste a tu cumpleaños.
—no, no, debe haber un mal entendido, Anne no es así, además ella sabe bien que no la invite a mi cumpleaños, le pedí que hiciera ella unos mandados el día de mi cumpleaños y que los fuera a dejar al apartamento, incluso se le pagará como horas extras
—bien, eso lo entiendo pero si no conoce sus límites, en el ambiente donde nos movemos, fácilmente el padre de jaaz se va a enterar, sabes que ella maneja la información de la inversión con su familia y si sabe de jaaz eso será un problema, sobre todo para ti.
—Lo hablaré con ella, ¿te dijo algo más el padre de jaaz?
—que vuelve este mes, ya sabes que debes hacer, nosotras si lo queremos en la familia.
—ja, ja, ja, eso es divertido, quizás se quiera quedar con ustedes pero no quiera nada conmigo.
—me sorprende que nunca hablaran, osea entiendo que el recuperó su número pero que no lo intentarás contactar, ni siquiera con tu falsa personalidad que usaste para acercarte a él al inicio, que fuerza de voluntad, si tu mamá desaparece, tiro una bomba.
El alfa no lo había pensado, tenía olvidada esa oficina en su casa hace meses, tantos, incluso antes de terminar con jaaz. El aparato que usaba para comunicarse con el omega ya debería estar sin batería en su cajón, incluso su inscripción al juego debe haber caducado.
Recibieron el almuerzo, rocío fue bastante distendida sobre el tema de jaaz y aunque Carlyle se sentía un poco incomodo, le gustaba hablar sobre él.
El almuerzo terminó cerca de las dos, cuando regresó a la oficina se soltó sobre esa silla, era una comida contundente en cuanto a información porque la comida era insípida desde que no estaba con su omega el médico le dijo que era normal, sus feromonas afectaban todo su cuerpo y si ya estaba tan compenetrado con una pareja, lo más normal es que sufriera un desbalance significativo, como el hecho de que su rut no llego por cuatro meses hasta ahora.
Ya deberían haber sido al menos dos.
Apretó el botón verde que conectaba con su secretaria, la mujer respondió y el la cito.
Ella era una omega recesiva bastante atractiva, aunque por supuesto Carlyle nunca a tenido problemas en trabajar o estudiar con omegas, porque nuca ha sentido atracción por ninguno.
No sabe cuando o en qué sentido le dio a entender algo más, ella es mayor por algunos años, trabajaba en la empresa hace dos años cuando camelia cambio sus funciones dentro de esta y la destino a trabajar con su hijo.
—como sabes, llevas más tiempo trabajando aquí que yo, el funcionamiento es muy claro y por supuesto respetamos a todos—comenzó por decir. —sobre todo, odiamos la difusión de información privada y me sorprendió escuchar a mi madre hoy reprenderme porque posiblemente le era infiel a mi pareja.
—¿pareja? —preguntó la chica sorprendida y con una mueca incomoda.
—pareja —reafirmó. —yo tengo un omega, esta fuera del país por temas de estudio, por su carrera, pero no tengo intención de tener a alguien más, serle infiel o cambiarlo.
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jaaz
RomanceSolo sabían algunas cosas entre ellos, Carlyle sabía más. Carlyle sabía que amaba estudiar, qué amaba el otoño y que le gustaba el mar en invierno. Qué la comida caliente debe estar hirviendo y comerse aunque queme. Qué el café medio dulce y medio a...