14.3 Vacaciones

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Punto de vista de Wan

¿Cómo es posible que cada que aparto la mirada de Yun un momento ella me mete en un nuevo y loco problema?, tengo que darle un castigo ejemplar, esta ocasión es diferente a su habitual actitud mandona, esta ocasión me a mandado a un lugar donde peligrará mi vida, me mando con la temible maestra sangre.

Después de calmarme un poco trate de idear un plan para estar preparado cuando me mandaran a esa isla, en primer lugar, al parecer compañeros prodigios de grados superiores llegaran antes que nosotros.

Yun no podrá acompañarme debido a que ira a ver a su hermano (espero que este le de un castigo ejemplar, ya le mande una carta para eso), por supuesto que hice todo lo posible para que me acompañe Chan, ojalá su extraño don me sirva de ayuda, además de Chan el director Won le pidió a Rina y al otro sujeto (compañero que ayudo con lo de la Dama pintada, pero que siempre se me olvida su nombre).

Aunque no me parecía la mejor opción, todo eso estaba dentro de mis expectativas, lo que me sorprendió fue que mi nuevo maestro de esgrima me acompañara, Fat dijo que era una manera de hacer que los soldados disminuyan sus sospechas hacia él, yo estoy seguro que lo hizo para huir o para asegurarse de deshacerme de mi si se presenta la oportunidad, lo que no sabe es que ya estoy planeando usarlo como conejillo de indias, planeo hacer que se enfrente directamente a la vieja bruja y después convencerlo que ellos son un peligro para el mundo o algo así, ya veré que se me ocurre.

La mañana en la que zarpamos me despedí de mis compañeros (en especial de las señoritas) y les di regalos como flores y golosinas, además les dije las típicas frases cliché sobre extrañarlos, aunque en realidad me valía un cacahuate si les pasaba algo (a excepción de algunos con familias medianamente acomodadas de los que podría sacar provecho después), algunos compañeros me pidieron un duelo de espadas, así que hicieron fila, vencí uno tras otro (con el mayor cuidado de no lastimarlos, me enfocaba en solo desarmarlos), pero la fila de oponentes en lugar de disminuir aumentaba.

Según me dijo uno de ellos me empezaron a mirar con admiración y creían que era una especie de líder que siempre ayudaba y que se preocupaba por ellos, incluso sus armas y equipo se los había regalado de mis ganancias con el gremio de herreros, sin mencionar que convencí a Fat que le diera clases a toda la escuela y no solo a nosotros tres, así que muchos querían llegar a sus hogares y presumir que habían entrenado conmigo y que era su amigo, debido a que esto podría beneficiarme en el futuro le seguí la corriente y despilfarre un poco de dinero invitando a todos a comer antes de partir.

Al subir al barco nos dirigimos a la isla de la vieja Hama, Chan lamento haber comido mucho de lo que les invite, después de todo el se mareaba mucho en los viajes en barco.

Mas tarde Fat se me acerco preguntándome si tenia idea de lo que podríamos encontrar en la isla, yo respondí que no tenia idea pero que seria una buena experiencia conocer nuevos lugares en vacaciones, claramente esto no le hiso gracia y me amenazo sutilmente diciendo que no bajara la guardia pues no podría protegerme de los peligros fuera de la academia, a lo que yo le respondí que en ocasiones el peligro radica en lo que los demás pueden manipular de tu interior.

Al llegar al lugar trate de buscar la posada con habitaciones mas cómodas y puedo decir que complete esa tarea formidablemente, Chan, Rina, el otro sujeto y Yo fuimos a comer mientras que Fat fue a buscar a los compañeros que en teoría ya se encontraban en la aldea.

Mientras comíamos me pareció buena idea preguntarle a la amable cocinera si podría hablarnos sobre los rumores del espíritu que te roba la voluntad y te desaparece, como era de esperar cuando se trata de espantos las personas muestran un singular interés y nos conto historias que si no fuera porque yo conocía la verdad me habrían dado miedo.

Reencarnado en el mundo de Avatar la leyenda de AangDonde viven las historias. Descúbrelo ahora