HAUNTED LEGACY // Finn Wolfhard [✔️]

22

Margot Tn Bellwood

Pasé esos días desde que salí con Finn pidiendo constantes permisos para lograr sacarle un pasaporte, lo tuve que hacer ir conmigo algunas veces pero no le decía el para qué lo hacía.

Faltando algunos días para que iniciaran las vacaciones de primavera fui a recoger su pasaporte y me sentí tan bien por eso, no sabía por qué su mamá no le sacaba uno, pero como yo pude hacerlo estaba feliz.

—No —aseguró cuando nos encontramos en su habitación y le di el pasaporte.

—¿Cómo que no? —cuestioné sin aceptar el pasaporte de regreso—. Es tuyo, ahí lo dice claro, Finn Michael Wolfhard además está tu foto.

—No lo puedo recibir, ¿Cuánto dinero te gastaste en esto? —cuestionó intentando devolverme su pasaporte—. Bellwood no puedo, de verdad que no.

—Finn, lo hice porque no es justo que te pases tres días metido en un autobús, por favor —insistí y él negó con la cabeza.

—¿Cuánto te gastaste en esto? —cuestionó de nuevo y me encogí de hombros, había pagado con la tarjeta, no sabía.

—No sé, use la tarjeta qué me dieron mis padres —Abrió los ojos y apreté los labios al ver sus fosas nasales dilatarse.

—Princesa, es demasiado —Negué con la cabeza—. No tienes que hacer estas cosas por mí, no lo puedo aceptar.

—Finn, Finn —me acerqué a él evitando que me devolviera el pasaporte—. Quise hacerlo no por mi, por ti. Es un regalo, además... No creo que quieras perder el vuelo de mañana.

—¿Me compraste un boleto? —cuestionó y sonreí con inocencia parpadeando varias veces—. Princesa, no te gastes tu dinero en mí.

—Finn, yo lo hago porque quiero y porque puedo, no rechaces mis regalos —pedí y él soltó un suspiró levantando la cabeza hacia el techo—. Además tenemos los boletos de avión juntos.

—¿Te los compras tú? —Asentí—. ¿Y tus papás?

—Me dieron una tarjeta de crédito para compensar que no pasan tiempo conmigo —respondí y después apreté los labios—. No tengo los padres más presentes del mundo.

—Bellwood, es demasiado —aseguró y negué con la cabeza—. Princesa, no sé si puedo aceptarlo sabiendo que gastas tu dinero en mí.

—Lo gasto en mi novio al que quiero, al que ayudo y al que si pudiera me lo comería a besos —Lo tomé de las mejillas poniéndome en puntitas para comenzar a dejar besos por todo su rostro haciéndolo reír por eso—. Te quiero mucho, por eso lo hago.

—Hoy estás muy amorosa, ¿A qué se debe? —Rodeó mi cintura con sus brazos ya que seguía sosteniendo su pasaporte.

—A que voy a poder mucho más tiempo con mi novio sin sentir miradas sobre nosotros —respondí dejando un corto beso sobre sus labios haciéndolo sonreír—. ¿Ya empacaste?