HAUNTED LEGACY // Finn Wolfhard [✔️]

E P Í L O G O

Margot Tn Bellwood

—Me parece extremista que me sacaras de la casa con los ojos vendados y no me des ni una pista de a dónde me llevas —respondí mientras la mano de Hailey tomaba la mía.

—Ya casi llegamos, amargada —Soltó una risa y yo puse los ojos en blanco bajo la venda—. No me pongas los ojos en blanco.

—¿Y tú cómo sabes eso? —cuestioné divertida por eso.

—Porque te conozco pequeño saltamontes —respondió y solté una risa para después detenernos—. Aquí es.

Quise quitarme la venda pero ella me lo impidió golpeando mis manos por lo que me quejé por eso.

—Te quedas quieta, yo me tengo que ir —Abrí la boca ofendida por eso—. Nos vemos hermanita.

Me crucé de brazos girando la cabeza hasta que me tense al sentir dos manos en mis hombros qué después me quitaron la venda.

—Hola princesa —Abrí los ojos emocionada y después me di vuelta viendo a Finn frente a mí así que lo abracé con fuerza rodeando su cuello con mis brazos.

Sentí su mano en mi cintura con fuerza y después me levantó dando vueltas sobre nosotros. Nos separamos del abrazo y yo lo tomé de las mejillas juntando nuestros labios.

Sentí una de sus manos en mi cuello haciéndome levantar la cabeza moviendo sus labios de forma pasional sobre los míos. Llevábamos cuatro meses sin vernos más que por un celular.

—Estás hermosa —susurró sobre mis labios y le sonreí dejando un corto beso en sus labios—. Te extrañé tanto.

—Yo también —aseguré volviendo a besar sus labios algunos segundos—. Me hiciste tanta falta amor, de verdad tanta falta.

Me sonrió para después dejar un beso en mi frente y yo hice lo mismo. Estaba tan feliz de volverlo a ver que me parecía casi irreal.

—Tienes el cabello con ondas —Sonreí pasándole una mano por este enredandolo un poco entre mis dedos lo que hizo su sonrisa crecer—. Me encanta, te ves tan bien amor.

—Tú estas aún más hermosa —Dejó un beso en mi frente—. Ven.

Tomó mi mano entrelazando nuestros dedos y después comenzamos a caminar por el parque hasta detenernos frente a una manta de cuadros rojos con una canasta y flores rojas.

—Feliz cumpleaños princesa —habló sonriendo—. Ven.

Ambos nos sentamos sobre el mantel. Me acomodé la falda para que no se levantará y después miré a Finn ladeando la cabeza mientras sacaba las cosas de la canasta.