Una cena... ¿especial?. No. Una cena muy extraña.
Katherine Page
Los días siguientes a esa noche con Tom no hubieron más reuniones ni mensajes, salvo el ultimó que él mando explicando que sería mejor esperar unos días antes de volver a verse, para ir despacio. nada. Con Maddison entendimos que después de la cena y como fue todo, necesitaría un tiempo para digerirlo y asimilarlo, al igual que nosotras y congeniábamos en que sería mejor ir de a poco.
Sobre todo si no tienes que verlo.
Exacto.
Respecto a como resultó todo la otra noche, Maddi quedó encantada con Tom. Dice que es un hombre muy inteligente, pero demasiado serio para su gusto, pero le otorga que eso hace resaltar su aura elegante, según sus palabras. Incluso se pasó los días tratando de encontrar similitudes entre ambos, la más clara a simple vista es su cabello del mismo tono castaño e igual de ondulado, pero lo que más le agrada son sus ojos, su color particular, ese gris azulado que hipnotiza e incluso la similitudes en su forma. Dice que le sorprende que tan alto es y que ella lastimosamente saco mi estatura. Me ofendo y trata de consolarme alegando que por suerte saco mis labios, ya que los de Tom son muy delgados —al menos destaca algo bueno de su madre—. Pero no ha logrado conocer nada respecto a su personalidad, así que esas preguntas me hace responderlas a mí mientras repasaba una partitura de la nueva canción que le dejo su profesor para practicar.
—¿Siempre ha sido así de serio?
—Es algo que lo caracteriza desde siempre. No sé le da mucho ser sociable.
—¿Cómo se conocieron? ¿Te enamoraste de él al primera vista?
—Ya has hecho esa pregunta, cariño.
—Cierto. ¿Qué cosas le gustan, qué es lo que más le importa? —también ya había preguntado eso, pero esa no me molestaba responderla otra vez—
—A ver... —busque en mi cabeza las palabras— Siempre le gustó leer, se la pasaba la mayor parte del tiempo en la biblioteca. Que cosas le importan... —busqué en mi memoria algo. Hay algo que le importe más que él mismo, lo dudo—. Es muy leal a su familia.
—¿Tiene más familia aparte de Mattheo Riddle? ¿Lo conoceré a él?
—Creo que ya han sido demasiadas preguntas. Como te habrás dado cuenta que tu fascinación a la lectura no la sacaste de mí, pero si la música, que te parece si hacemos un dueto —sugerí en un intento de distraerla de tantas preguntas—. Hace tiempo no lo hacemos y de paso practicamos esa nueva canción.
Eso le resultó más emocionante. Me acerque al piano y ella se acercó a mi con su violín acomodado en su hombro y comenzamos. Mis dedos se deslizaron con nostalgia por las teclas sonando ambas en perfecta sincronía. Amaba cuando hacíamos esto, me recordaba tanto a cuando yo hacía duetos con mí madre antes de que muriera. A veces la extraño demasiado.
Al terminar celebramos que nos salió a la perfección hasta que nos espantamos al escuchar un ruido golpeando una ventana. Busqué cual había sido y me extrañé al encontrar una lechuza aleteando contra el vidrio sosteniendo un sobre en su pico. Ordené a Maddison que se quedata en el lugar y me acerqué a abrir la ventana y la lechuza se paró en el marco. Cuando sostuve el sobre el ave lo soltó y acaricié el costado de su cuello.
Extrañada, ya que nadie envía cartas hoy en día, leí con detenimiento la nota de enfrente:
"Srta. Katherine Page
4° piso del edificio de la calle Carnaby Street
Departamento 231 B"
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El Brillo de sus Ojos | Tom Riddle
Fanfiction"Al ver el brillo de sus ojos fue como si hubiese pasado una eternidad desde la ultima vez que los vi, y a la vez fue como si no hubiese pasado ni un solo segundo..." Tom y Katherine tenían Pasado, un triste pasado. Pero la suerte, a la cual le enc...