"Recuerdos del ayer pasados"

Capítulo 42

-Buenos días pequeña- aparece Matias con un ramo de flores-.

-Buenos días Matias. Qué haces aquí tan pronto? Ves a dormir anda- dice Olga-.

-Vine a verte-.

-Si, y a despertarme también, que son las 6.30 de la mañana- dijo con un tono malhumorado-.

-Entonces te dejo aquí el ramo de flores en el jarrón y más tarde regreso a verte si no hay nadie- le dió un beso en la frente-.

-No, ya que estas aquí quédate a dormir en el sillón que mi madre no estará hasta más tarde- le dijo cogiéndole el brazo-.

Ella volvió a dormirse y él mientras dormía la observaba cogiéndole la mano.

Horas más tarde aparecí yo, a las 10.30, asomandome por la puerta con cuidado a no despertarlos, me llevé a Matias a fuera de la habitación.

-Cuando tienes pensado decirselo? El año que viene?-.

-No estoy seguro de ser yo quién se lo diga, pero si se entera por ti estando yo a su lado pues.. no lo veo - me insiste-.

-No, se lo dices tú que por algo lo hiciste y debes ser tú el sincero en la relación que teneis, no crees?-.

-Sí, será mejor. Crees que se lo va a tomar mal?- dice mientras le tiemblan las piernas-.

-Hombre, le has sido infiel, piensa que eso le va a doler aunque seas tu quien se lo haya dicho y lo debe saber cuanto antes-.

Tras unos momentos de dudas, lo empujo hacia dentro de la habitación del hospital y esperamos a que se levante.

Matias estaba tan nervioso que empezó a morderse las uñas y a mirarla, a punto de llorar, intentaba calmarlo pero era casi imposible.

Olga empezó a abrir los ojos, dos personas con la mirada clavada encima de ella, se asustó y mirandonos a los dos precipitó a preguntarnos.

-Qué pasa? Por qué me mirais tanto? -dice mientras frota sus ojos verdes-.

Miro a matias y le doy la señal para hablar. Nervioso me mira y empieza a tartamudear.

-V..v...verás, yo no quería p..p...pero-.

Olga interrumpe:
-Pero qué pasa?

-Te acuerdas que tenía una amiga llamada Martha que estaba obsesionada conmigo?-.

-S..sí, qué pasa con ella?-.

- El otro día... el otro día me fuí a una discoteca porque quería desconectar y bueno.. pasó lo que pasó. Lo siento-.

-Pero qué pasó, la llevaste a su casa, os disteis un beso, tonteasteis, qué pasó?-.

-Tuvieron una noche, eso es lo que él te quería decir- termino yo-.

-Es eso, ahora puedes decirme de todo, he sido un inútil, un gilipollas-acaba él-.

Olga me mira a mi y a él y tras unas lágrimas lo hechó fuera de la habitación sin querer saber nada de él. Yo mientras él se iba me quedé con ella, a pesar que él es mi amigo, debo apoyar a los dos y empezaré por ella ya que él tuvo la culpa y no debería ser el primero en ser el herido.

Intenté de todas las formas animarla y algo la hice sonreír pero entiendo que le duela, lo que hizo estuvo muy mal. Y lo mejor es que pese a que le duela por parte està agradecida por que sea él quién se lo diga y no una persona cualquiera.

Cuando salí del hospital me esperaba Nico para subir a casa, lo que les pasó me duele pero tampoco es mi culpa.

Subí al coche y de camino a casa Nico me miraba con cierta curiosidad aunque yo no prestaba demasiada atención. Yo sabiendo que me intimidaba me giré hacia él y me besó, lentamente. No pude apartarme a tiempo, a parte que tampoco lo queria negar.

Ese beso justo paró cuando llegamos a su casa, cuando su madre nos avisó desde la ventanilla del coche.

Quiso adelantarse a subir antes pero por qué será...