Capítulo 11

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Eran ya pasadas de la 13.00 de la tarde y Erik no aparecía, realmente se fué a la compra? No lo sé pero mi padre llegó a casa y para evitar discusiones empezamos a servirnos la comida y a comer. Sin palabras en la mesa comíamos tranquilamente hasta que tocan el timbre, toda feliz me acerqué a abrir pensando en que era él, pero no lo era. Mi madre desde la mesa me decía para dejarle pasar y preguntó quién era. Con las manos en la cabeza dejé pasar a Alberto, mi mejor amigo. Se sentó con nosotros a comer.
Después de acabar nos fuimos a mi habitación y allí charlamos, de lo que pasó últimamente con Aida y con David. Le insistí en que me contara más de él, hace mucho que no se nada de su vida. No hizo falta que supiera que allí anteriormente estuvo un chico, tenía ya una prueba que es imprescindible descifrar.
Se dejó su móvil encima de mi nesa de noche de dormir, y junto al móvil había una notita que ni yo misma había visto en toda la mañana ni el mediodia. Miró varias veces el móvil para ver si era lo que él creía cierto que estaba pasando. Y es que Al se alegra de que me vayan bien las cosas, pero sigue pensando que lo que estoy haciendo con sus corazones y con el mío propio no esta bien. Hay veces en que creo que hasta él siente algo por mí también, me mira mucho, se pasa los dias, las horas y los segundo mirándome, de labios a ojos, y de ojos a cuerpo, no puedo evitar fijarme en eso. Y desde que somos mejores amigos noto que se acerca cada vez más. Siento cómo si quisiera besarme o tenerme más allá de una amistad. Pero no estoy segura, nos queremos por igual, es mi mejo y como que no dejaría una buena amistad por ese tema.
Pasamos las horas riendo, pasándolo bien en mi cuarto tumbados. Entre risas, abrazos, histórias de nuestra vida, etc.. Veo pasar una sombra por la puerta, me pareció ver a Erik, pero no estoy segura. Fuí hacia la puerta aver si era él y efectivamente, fué tan rápido que ni si quiera pude analizarlo bien. Me pedía que lo siguiera pero no podía dejar sólo a Al, así que le dije que esperára en su cuarto de invitados. Hablé con Al para que esperára unos minutos y fuí detrás de Erik. Sin idea a dónde podíamos ir, me dejé  llevar por el simple hecho de estar con él.
Tras varios minutos ausente en mi habitación volví y retomé la conversación hasta que eran las 5 y 30 que Alberto se tenía que ir y yo me tenía que ir a preparar.
En 30 minutos quedaba con David, no sabía qué hacer ni como ir vestida, así que decidí ponerme algo simple. Tengo que confesar que como me visto para Erik no me visto para David.

"Recuerdos del ayer pasados"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora