Historia basada en la serie 911.
Todos los personajes pertenecen a la serie a excepción del personaje principal y otros personajes nuevos que irán apareciendo a lo largo de la historia.
Es un fan fic que seguirá el orden cronológico de la serie.
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La mejor lección que tuve durante estos últimos días fue a no forzar nada, conversaciones, amistades, relaciones, atención y amor. Las cosas forzadas no valen la pena, lo que fluye, fluye y lo que falla, falla. Alce la mirada hacia el segundo nivel, podía sentir unos ojos fijos sobre mi y no era precisamente Buck, pues lo tenia pegado a mi lado como un maldito velcro, no podía quitármelo de encima. Había sido así desde que lo había perdonado, se había tomado demasiado en serio lo de hacer bien las cosas. Aunque después de lo ocurrido con esa mujer accidentada, había visto un notorio cambio de actitud. Sigue siendo el mismo payaso que conocí hace un tiempo, pero al menos se esta tomando esta tercera oportunidad bastante en serio, espero que ahora si haga las cosas bien. En fin, al ver hacia arriba note a Oliver con una sonrisa exageradamente amplia, con un gesto me indico que subiera, espere un momento de distracción de mi torpe amigo para poder subir.
— ¿Qué harás esta noche?
— Ir a casa.
— Vamos a cenar... solo tu y yo. Sin tu amigo.
— ¿Una cena? ¿Solo tu y yo?
— Claro. Me gustaría pasar un momento a solas contigo. – susurro sobre mi oído logrando que la piel de mis brazos se erizara por completo. - ¿Qué dices? Tengamos una cita.
— ¿Ahora es una cita? Edwards ¿Estas bien? – acerque mi mano hacia su rostro para asegurarme de que no tuviera temperatura. – no tienes fiebre ¿Consumiste alucinógenos? No me digas nos trajeron brownies de nuevo.
— Oye, hablo en serio. Una cita. Ya hice la reserva, si me dices que no lo entenderé y será humillante y seguramente tardaré bastante en reponerme. Pero si me dices que sí, puede que sea la mejor noche de tu vida en mucho tiempo.
— ¿La mejor noche de mi vida? bien, espero cumplas con eso. – me puse en puntas para alcanzar su oído apoyando una mano contra su cuerpo. – más te vale que si sea así.
Volver al mundo de las citas. No era algo que se me pasara por la cabeza, no por ahora. pero me sentía a gusto con él, aun con todas las obvias diferencias que tuvimos desde un comienzo. Su trato no había sido el mejor de todos. Las sirenas me hicieron reaccionar de inmediato. Buck me ayudo a ajustarme el cinturón, como si yo no pudiese hacerlo sola, de igual forma lo obligue a ponerse este. Ninguno de los dos quería repetir lo que había pasado hace tiempo. Era mejor no arriesgarse a terminar aplastados. Llegamos hasta una pista de patinaje donde se llevaba a cabo un espectáculo sobre hielo. Escuchamos lo dicho por la encargada del evento. Apenas escuche lo de los dedos cercenados, Buck y yo nos quedamos mirando. Habíamos estado esperando por eso bastante tiempo, bueno no es que nos alegrara que una persona terminara lesionada de esa forma. Pero sería divertido.
Una vez que tuvimos nuestras indicaciones entramos a la pista resbalando ocasionalmente en el hielo, mi amigo prácticamente termino arrastrándose en el suelo al no poder mantener el equilibrio. Negué un par de veces antes de comenzar a buscar los dedos cercenados esparcidos por el lugar, cuatro dedos. La ventaja el hielo frio mantendrá las piezas en perfecto estado para poder llevarlos al hospital y que se los vuelvan a poner.
