Historia basada en la serie 911.
Todos los personajes pertenecen a la serie a excepción del personaje principal y otros personajes nuevos que irán apareciendo a lo largo de la historia.
Es un fan fic que seguirá el orden cronológico de la serie.
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El mundo necesita mas tonto. No podía estar en mas desacuerdo con esa frase. El mundo no necesita mas tontos, necesita mas personas capaces de razonar y no cometer idioteces que puedan costarle la vida a ellos o a los que los rodean. La mayoría de los accidentes son por imprudencias, distracciones o simple idiotez. Tengo muchos casos en mi memoria relacionados con eso, a mi mente vienen demasiados casos. Incluyendo al chico con el microondas en la cabeza al que rescatamos hace un tiempo o al tonto que termino envuelto con una manguera en el lavado de autos. Hombres atorados en cercas solo para cumplir alguna clase de reto de internet y la lista sigue y suma. Los tontos no deberían existir. Nos ahorrarían valioso tiempo.
Hoy era uno de esos días en donde los casos tontos abundaban, personas imprudentes. Esas que me daban ganas de golpearlos hasta hacerles entender que estaban siendo unos completos asnos. Gire la mirada hacia Chimney, no había hablado con el desde que me fui del bar, desde que lo llame un idiota, tal vez ambos tengamos una charla pendiente y por lo que me conto Buck, el y Albert tuvieron una larga conversación que al parecer termino con ambos en buenos términos. Y Oliver tiene razón, no es mi asunto y debería tener control respecto a mis propias emociones.
— Buenos días. – dije mientras me acomodaba junto a Buck para desayunar.
— Hola Jack ¿Cómo sigue Oliver?
— Pues esta bien, esta algo triste. Es normal. Pero va mejorando.
— Jack, ten.
— Gracias Bobby. – esboce una sonrisa al recibir los panques.
— Le dije que podía tomarse el tiempo que necesitara. – asentí.
— Todos aquí hemos perdido a alguien, es complicado, pero es parte de la vida. Oliver sabe eso.
— No es lo mismo Hen. – mencione entre suspiros. – no es lo mismo perder a una victima que perder a alguien de tu familia. En fin, podemos cambiar el tema. – lleve un poco de panque a mi boca, Bobby si que sabia como hacer de los días grises soleados con algo tan pequeño como eso. - ¿Cómo esta Albert? – cuestione a Chimney que no me quitaba los ojos de encima.
— Pues esta bien, esta pensando en que hará con su vida ahora que esta aquí.
— Que bien... lamento haberte llamado idiota. Bueno si te portaste como un idiota, pero no me correspondía decirlo.
— No, esta bien. Tienes razón, si me porte como un idiota. Eres mi hermanita menor así que puedes llamarme idiota cuando quieras. Pero no te enojes conmigo.
— Lo prometo. – le lance un beso.
Por primera vez en mucho tiempo habíamos logrado desayunar con calma sin que las alarmas nos dejaran con el bocado en la boca. Intercambiaba mensajes con Oliver, que seguía en casa intentando deshacerse de todas las cosas que eran de su madre, habían muchas cosas antiguas en el ático, fotografías, papeles, libros y ropa que seguramente tiraría a la basura. Me enviaba fotografías de las cosas que había encontrado, fotografías suyas de niño y no podía negar lo adorable que era. Cachetes regordetes y grandes dientes. Era la descripción de adorable y tierno.
