Poché.
—¡Abi! —me quejo mientras tomo rápidamente un par de servilletas de la mesa y me limpio la cara.
—Perdón, perdón —la escucho decir mientras imita mi acción y me ayuda a secarme el café que literalmente acaba de escupirme en la cara.
—¿Estás bien Poché? —pregunta Liz, que a diferencia de nosotras se encarga de limpiar la mesa.
—Si Liz, gracias —respondo volviendo a sentarme en la mesa y evitando mirar a nuestro alrededor muerta de pena. Puedo sentir como toda la gente que está en la cafetería del hospital tiene su atención puesta en el desastre que acabamos de hacer.
Hace casi una hora que ambas llegaron para saber noticias de Daniela, sin embargo, al no poder verla ya que Ximena la llevó a hacerle unos estudios decidimos venir a la cafetería del lugar aprovechando para ponerlas al tanto de lo que había pasado con las personas de la policía esta mañana.
—Lo siento mucho Poché —repite Abi visiblemente apenada sentándose también en su lugar.
—Está bien Abi, fue un accidente, no pasa nada —digo tratando de restarle importancia para que no se sienta aún más mal —Pero bueno, como les decía... —retomo rápidamente el tema para olvidar el incidente —Daniela está segura de que la otra persona que estaba en el establo era Ivana y que fue ella la que terminó golpeándola por la espalda y dejándola tirada en medio del incendio.
—De ser cierto, eso es algo muy grave Poché —opina Abi, cosa con la que sin dudas estoy de acuerdo —En ese caso, no sabemos hasta dónde sea capaz de llegar esa loca y francamente con lo que nos dices, lo sucedido con la mujer de Los Ángeles ya no me parece tan descabellado.
Pienso en lo que Abi acaba de decir y concuerdo en que si antes la idea de que Ivana, con todo y su locura, fuese capaz de atentar contra la vida de otra persona nos parecía exagerada ahora todo cambia radicalmente.
—Y Daniela ¿cómo está? —me pregunta Liz en un tono que intenta sonar de lo más normal, pero en el que es visible la preocupación.
—No lo sé Liz —respondo soltando un suspiro —Ella dice que bien, y sé que físicamente está lastimada y todo, pero... —pienso un momento en cómo explicarme —Emocionalmente no sé cómo se encuentre, luego de que los agentes se fueran hay ratos en los que se pierde en sus pensamientos y bueno... no lo sé.
—No debe de ser fácil para ella Poché —responde la chica dándome un ligero apretón en la mano como apoyo —Han sido demasiadas cosas y demasiados cambios en muy poco tiempo. Hay muchas cosas que Daniela tiene que asimilar y eso necesita tiempo. Lo único que puedo aconsejarte es que seas paciente con ella —asiento mirando la sonrisa amable de Liz.
—Y si a eso le sumamos el hecho de que posiblemente la persona con la que compartiste una parte de tu vida posiblemente tuvo que ver con que tú y tu mejor amigo casi pierdan la vida... —interviene Abi.
El comentario de Abi solo consigue hacer que un escalofrío recorra mi cuerpo al siquiera considerar que algo así hubiese pasado.
Ninguna de las tres dice nada y nuestro silencio solo es interrumpido cuando mi teléfono suena anunciando la entrada de un mensaje, lo saco de mi bolsillo y desbloqueo la pantalla para ver de qué se trata.
—Es Juliana —les digo a mis dos acompañantes volviendo a guardar mi teléfono —dice que ya volvieron a llevar a Daniela a la habitación, que ya podemos subir.

ESTÁS LEYENDO
Un salto al corazón
FanfictionLa miro concentrada a la distancia, sé que está nerviosa, pero tiene el temple necesario para que nadie más lo note. Sé cuanto ha trabajado, sé cuanto ha sufrido por esto. -Tú puedes amor -digo en susurro esperando que esas palabras lleguen hasta su...