Cuando se conocieron, Harry y Draco empezaron con el pie izquierdo, pero aun quedaba mucho tiempo de sobra, Draco conseguiría su amistad, costara lo que costara, tardara lo que tardara, él no se iba a rendir. . . Aunque con el tiempo él quisiera muc...
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—¡Espera! —le gritó Harry corriendo detrás de él. Draco lo ignoro y continuó caminando a grandes zancadas—. ¡Te dije que esperes! —dijo de forma autoritaria mientras lo detenía tomándolo del brazo.
—¿¡Qué!?¿¡Quieres que me quedé sin hacer nada!?
—No se que piensas hacer pero lo único que vas a lograr es que te castiguen también.
—Eso es lo de menos —respondió tratando de zafarse de su agarre—. Sueltame.
—Eres muy terco —dijo con una pequeña sonrisa—. Perdoname, aunque lo olvidaras, literalmente... —saco su varita, lo apunto y antes de que Draco opusiera más resistencia dijo—: Obliviate.
Soltó a Draco y espero a que esté hablará. Deseaba con toda su alma que el hechizo le hubiera salido bien.
—Me duele la cabeza... —se quejó de repente llevándose las manos a la cara, segundos después se dedico a observar el lugar en en el que estaba parado—. ¿Qué hacemos aquí? ¿No estábamos en el campo de quidditch?
—Ah, sí… —se quedó pensando en alguna excusa— lo que pasa es que te caíste y te estaba llevando a la enfermería —solto una risa nerviosa.
—¿De verdad? No recuerdo nada... Estaba en mi escoba y luego... luego... Nada, no puedo recordarlo.
—Debe de ser por el golpe —le afirmó con la voz temblorosa.
Tardo un poco más en convencerlo de que se había caído de su escoba y por eso no era capaz de recordar nada. Luego de ese incidente Harry se esforzó por mantener su mano derecha fuera de la vista de Draco.
...
—Tengo una duda —le dijo Draco llevándolo a una esquina, lejos de los demás—. ¿Esta habitación puede transformarse en cualquier cosa? ¿Literalmente lo que sea?
Harry puso los ojos en blanco y se cruzó de brazos.
—Creí que ibas a preguntar algo sobre la clase —guardo silencio unos segundos—. Pero sí, se transforma en lo que sea según tus necesidades. ¿Por qué preguntas?
—Solamente tenía curiosidad... —solto una risita nerviosa y el rostro se le comenzó calentar.
—¿En qué estás pensando? —pregunto arqueando una ceja.
—Estaba pensando en cuándo fue la última vez que estuvimos a solas. No hemos tenido nada de tiempo para pasar juntos.
—Tienes razón... —murmuro y se quedó en pensando durante unos segundos. Suspiró y luego le sonrió felizmente—. Te veo aquí a las tres de la mañana.
Harry siguió "dando clases" y Draco volvió a seguir practicando con Luna, aunque estaba tan ansioso que no podía concentrarse en lo que hacía así que Luna lo paralizó y aturdido más de la cuenta.
