Capitulo 15

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Dary

Este día ha sido el más largo de todo el año.

Trate de convencer a Royal de que me preste un puto teléfono, pero parece que le tiene miedo al mafioso. Se negó rotundamente.

-Si nos descubren nos meteremos en problemas.

Así que tengo ganas de leerme un buen libro.

Subo a la biblioteca y tal como la última vez abro la puerta por fuera. Entro y vuelvo a ver todos esos libros allí polvorientos.

Tomo los que puedo y los llevo en brazos. No hay nadie en el corredor así que me apresuro a entrar en mi habitación.

Me tumbo sobre la cama.

"Las tristezas no se hicieron para las Bestias, sino para los homres; pero si los hombres las sienten demasiado, se vuelven bestias"

Esa frase me llama mucho la atención.

Vale, no se porque esto me hace pensar en el Mafioso. Sigo leyendo el capítulo XI, de la segunda parte de Don Quijote de la Mancha.

Recuerdo haber visto esta frase en otro lugar o no sé si era la frase o la palabra bestia que recuerdo de un manuscrito -si mis sentidos no me fallan, está en una de las repisas de la biblioteca-, salgo corriendo hacia allá.

Y ahí los consigo, leo el que me llama la atención.

No tiene título. Leo solo un fragmento.

"Una bestia me arrebato lo que más amaba, era tan feliz. Esa felicidad me la quitó, de una forma tan inhumana y cruel, fue como si todos tus sueños los tirarán a la basura y te arrojaran con ellos haciéndote picadillos. Desde el primer momento que sentí el dolor de la perdida, lloré como un desquiciado, no podía olvidar aquella escena. Mostré debilidad y por eso me la arrebataron. Todo pasó tan rápido, me sentí como una alma en pena, quería morir también.

Desde aquel día, no logré superarlo, por eso me sentí un desgraciado, a penas era un niño, y me llene de tanto dolor, odio y rencor. Deje que eso me sobrepasara, hasta el punto de jurar convertirme en una bestia infernal, sentía la necesidad de superar aquel monstruo, para acabar con ella. Venganza es lo que necesitaba. Mas no contaba con que me fueran a mandar lejos. Sin embargo eso no impidió que me convirtiera en la bestia que soy ahora. Lo estaba logrando.

Cada vez me volvía un ser antipático, frío, no lograba sentir ninguna emoción, deje de tener compasión para convertirme en un sádico. Y todo porque deje que la tristeza me dominara en exceso"

Trago grueso, mi corazón se encoge, y no quiero seguir leyendo. ¿De quien habla? Esto está escrito a mano, no tiene firma del autor ni fecha, nada. ¿Lo escribiría Rey?

Me viene a la mente la frase del libro, el segundo fragmento; "si los hombres sienten demasiado, se vuelven Bestias, es una clara advertencia, si los hombres permiten que la tristeza los domine en exceso, pueden perder su humanidad y comportarse de manera similar a las bestias.

De repente me sobresalto al escuchar la puerta y coloco rápido el libro sobre la repisa.

-Feliz cumpleaños -me felicita serio nada más y nada menos que el mismísimo Rey.

Me quedo como estatua ya que no se procesar esto. Y como sabe el de mi ....?

Es como si esto le estuviera costando un mundo -tensa la mandíbula.

-Ehh.... Gracias?

-Roy te tiene un pastel en la cocina procura bajar cuanto antes -de repente, pasea la mirada por el lugar.

Atrapada en la Mafia Donde viven las historias. Descúbrelo ahora