La diosa del inframundo

Capitulo I

“El arte de la guerra es someter al enemigo sin luchar”

– Sun Tzu.

Eliana Romasanta.
Volumen I
25 años.
Viernes 16 de octubre.
4 meses atrás.
Megafauna marina.
Basílica de San Pedro, Vaticano.

Una semana aquí una maldita semana en el tejado de la basílica de San Pedro en el Vaticano. Mi maldito esposo me mandó con Sergey a matar al padre Anastasio de Sevilla él será quien tomo el puesto de consejero después de la muerte de Leonor d'Amykos la segunda mujer en llevar el título de consejera del comando general. Él será el siguiente, ninguno de los dos le sirve en el consejo, así que va a matar a los dos, él se está encargando de Leonor y nosotros de Anastasio.

Hoy lo declaran santidad. Una santidad de la iglesia católica cristiana y romana. Miles de personas han llegado al Vaticano dispuestos a festejar esta nueva santidad de la iglesia, se confirmó su segundo milagro hace poco.

   —Ecco una nuova santità che sarà fedele a Gesù Cristo nostro Signore—. El sonido de la máxima autoridad católica llena el espacio. Fue extremadamente difícil subir hasta aquí. Por eso llevamos tanto tiempo una semana, una maldita semana con poca alimentación y más que todo agua. Además, Sergey. Trata como si le metiera un palo por el culo todos los días. Siempre me grita y me da miedo. Es mi teniente desde que llegué.

    —¿Qué ha hecho para que lo quiera muerto? — Me pregunto.

    —¿Quieres la verdad o te miento? No soportará escucharte llorar, no quiero que la niña consentida de la reina Mercedes se ponga a llorar como siempre —. Lo odio, odio a Sergey, odio a Anggelos odio a Yaar y a Chernov los odio a todos, incluso a Deniska la odio tanto. Todos son una partida de bastardos encabezados por mi esposo. Aun así por primera vez toma mis valores como prioridad.

     —Miénteme —. Le pido. La celebración de conmemoración avanza con rapidez mientras Sergey habla.

    — Anastasio de Sevilla ha encabezado la lista de pederastas durante décadas. Lo hemos buscado por toda Europa y el mundo durante meses. Es considerado un asesino de alto nivel y tiene un rango criminal de 3 sus milagros solo son obra de la ciencia. Su objetivo principal ha sido las novicias de los conventos. Le encantan las vírgenes. Abusa de ellas diciéndoles que son pecadores y deben redimirse y flagelarse por sus pecados de la manera en la que él lo desea —. Lo detesto tanto por qué siento que es verdad.

Miente con profesionalismo. Todos en la central tienen mejores capacidades que yo. Me han humillado y rebajado por no querer asesinar aun así no me salve. Hoy tendré que demostrar mi valor. Si no lo hago no podré mostrar realmente que estoy al mismo nivel que cualquiera de ellos. No podré mostrar que realmente me esfuerzo como un burro todos los malditos días para demostrar que no soy una inútil.

    —¿Eso es verdad o mentira? — Cuestiono, Sergey no tiene sentimientos. Mata sin compasión regaña sin piedad y usando palabras crudas y brutales. Por eso es teniente porque tiene el carácter y el poder para manejar a grupos enteros de hombres machistas. El tipo de hombres que mi padre aborrece.

    — Mentira — Responde iniciando a armar un segundo rifle de francotirador, es demasiado, velos armándolo —Átate el cabello, ponte los guantes y tapabocas junto con las gafas, ponte esto.

Me da una chaqueta grande. Es una cobija enorme que cubrirá cualquier parte de mí.

   —¿Pará qué? —Le cuestionó.

   —No dejar rastro—. Dice como si nada—. La pólvora salpicará y nos marcará, si se les ocurre traer a los perros para rastrearnos no será difícil encontrarnos, los guantes para no dejar las huellas en el arma, cabello recogido para lo mismo, no dejar ni una pestaña como evidencia. Espero que sigas mis órdenes al pie de la letra, si nos descubre te voy a arrancar cabello por cabello de tu cabeza de inútil.