🎶 You're Losing Me 🎶
"Do something, babe, say something" (say something)
Lose something, babe, risk something"
Apenas soy capaz de dormir un par de horas durante la noche. Sé que mi hermano está bien y que Finn lo cuida, pero todavía tengo el susto en el cuerpo.
Adrien tampoco descansa bien. Me abraza todo el tiempo y aunque por su respiración puedo notar que hay ratos en los que se duerme, se despierta tan pronto como yo me muevo un poco. Está muy pendiente de mí.
Al día siguiente, antes de ir al hospital, hablo a Beth para tratar de conseguir el día. La respuesta de mi amiga me hace reír.
—Por supuesto que tienes el día libre. Además, ¿qué es lo peor que pueden hacerte? ¿Despedirte? Como si no tuvieras un trabajo mejor esperándote.
También pasamos por el piso de mi hermano para recoger un par de mudas limpias. Seguimos las indicaciones de Finn y ahí me doy cuenta de que prácticamente toda la ropa de los dos está en la misma habitación. Ahora entiendo por qué estaba tan vacía. Lo más probable es que no fuese la habitación de mi hermano, sino la de invitados.
Al llegar al hospital encontramos a Gabriel despierto y con mucha mejor cara. Finn, al igual que nosotros, tiene aspecto de cansado.
—He dormido toda la noche, estas drogas son geniales —nos confirma cuando preguntamos—. Aunque me tiran que flipas las grapas del estómago.
Me siento en una silla a su lado y Finn se estira en el sofá.
—Voy a bajar a desayunar —informa, aprovechando que estamos aquí—. ¿Queréis algo de la cafetería?
Niego con la cabeza pero Adrien replica:
—Ahora voy yo también, dame cinco minutos.
Finn levanta el dedo pulgar en señal afirmativa. Luego se acerca a mi hermano para darle un apretón en el hombro antes de irse, pero él lo toma del brazo y le hace inclinarse sobre la cama antes de darle un beso en los labios. Cuando se separan, nuestro amigo nos mira con los ojos muy abiertos y después a Gab.
—¿Qué? —Replica éste—. Si ellos ya lo saben.
—Enhorabuena —comento con una sonrisilla.
Las mejillas de Finn se tintan de rojo y musita un leve gracias antes de salir de la habitación.
—Pobrecito —riño a mi hermano—. Le ha dado vergüenza.
—Pues no sé por qué, en la intimidad no parece tener de eso.
Niego con la cabeza mientras Adrien suelta una carcajada a mi lado. ¿Cuándo hemos pasado de que escondan su relación a que me cuente detalles tan personales?
Una vez el momento se pasa, todos nos ponemos un poco más serios. Adrien toma aire y se acerca a mi hermano.
—Quería disculparme contigo, Gabriel. Siento mucho haberme ido a vivir con Gia sin decírtelo.
—Yo también lo siento. Estuvo mal ocultártelo.
Nos mira a ambos, y aunque ayer dijo que nos perdonaba, también estaba bajo los efectos de la anestesia. Tengo miedo de que se enfade.
Sin embargo solo se encoge de hombros y pregunta:
—¿Y yo qué le voy a hacer? También os oculté a los dos mi relación con Finn. Somos humanos, cometemos errores. Lo importante es aprender de ellos, ¿no?
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Un Inesperado Nosotros
Genç Kurgu¿Y si es muy tarde para empezar de cero? Cuando Gia Davies se muda a Nueva York, está huyendo. Se ha dado cuenta de que su carrera no le gusta, su relación es un fracaso, y tiene la sensación de estar tirando a la basura todos los años de estudio y...