Cautiverio (alfaxalfa)

Distancia

Dos semanas, dos semanas es el tiempo que tuvimos juntos, antes de que una llamada rompiera nuestra bonita rutina que apenas empezábamos a construir. Dicha llamada alejó a mi novio de mi lado por muchos kilómetros de distancia. Así que ahora estamos manteniendo nuestra relación a base de mensajes, llamadas, etc. y así ha pasado un mes. Uno dirá, si ya aguantaron más de diez años pueden aguantar unos meses, pero no es así, una vez que pruebas la dulce vida de noviazgo con Alex es imposible regresar a como eras antes de probarlo. Ante nuestra repentina separación siento que estoy sufriendo lo que llamarían ansiedad por separación, ya que no hay día que pase en el

que no piense en Alex, en lo que estará haciendo, con quien estará, y si encuentra a otra persona, y si deja de amarme. Ahora que recuerdo él no ha dicho que me ama, solo yo lo he dicho, y si él no siente lo mismo que yo, puede que al contrario de mi a él no le haya gustado lo que probó. Que tal si utilizo el truco de "llámame para sacarme de un apuro" tal vez ya no se sentía cómodo y decidió que era momento de escapar.

La cabeza de Mark seguía maquinando millones de probabilidades que solo cesaron cuando su celular timbró.

-Te extraño.

Después de leer el mensaje la ansiedad de Mark desapareció.

-Te extraño mucho más

Envío el mensaje, dejo caer todo su peso en la silla en donde se encontraba sentado, llevó su cabeza hacia atrás y cerró los ojos, estuvo en aquella posición los siguientes treinta minutos. Toda su mente está ocupada en Alex y lo mucho que lo extrañaba, lo mucho que ansiaba verlo, olerlo, impregnarse de sus feromonas. En fin, todo era Alex en su cabeza. Entonces una idea pasó por su mente, abrió sus ojos y sonrió.

Durante toda su vida Mark no había trabajado tanto en un proyecto como lo hacía ahora, tenía que preparar paso por paso de principio hasta el final. Si quería hacer lo que tenía pensado debía dejar todo resuelto en la organización, planes, conferencias, tratados, todo tipo de trámites y eventos en lo que tendría que estar presente, fueron dos meses de trabajo duro. Había días en los que no dormía, pero todo valdrá la pena cuando llegue el momento.

Y así pasaron otros tres meses las llamadas entre Mark y Alex eran cada vez más largas y seguidas. Al inicio se videollamaban una vez a la semana, después fue cada quinto día y ahora hablaban cada dos días. Hasta que un día Mark ya no contestó.

"Ha de estar ocupado" fue lo primero en lo que pensó Alex. Después de todo su novio era un importante y muy ocupado hombre de negocios. Así que siguió trabajando después de todo "él llamará cuando vea mi llamada" pero al pasar dos horas esto no sucedió, Alex no quiso alarmarse, pues él más que nadie sabía que había juntas que podrían tardar horas, cuando pasaron otras dos horas no había pensamiento que lo calmara excepto el "si le hubiera pasado algo, ya me hubieran avisado" siguió atendiendo su agenda del día. Dos horas más pasaron y ahora se dedicaba a buscar en las noticias internacionales ya que Tita noticia ya sea mala o buena siempre llegaba, de alguna u otra manera, a los medios. Entraba a todos los apartados, recargaba como loco las páginas, pero nada salía "si nada sale es porque nada mala ha pasado" pensó una vez más para darse ánimos. Pero la ansiedad que su corazón sentía no lo dejaba. Entro a su agenda y llamo una vez más, solo que esta vez no fue a Mark.

-hey Alex, ¿qué pasó?

-Lila, para lo que resta de la agenda es muy necesario que esté presente- preguntó esperando a que su socia respondiera de manera negativa.

-¿bromeas, verdad? Es súper importante y necesario que estés presente.

-Lila, no te preguntaría si no fuera algo urgente.