𝘌𝘓 𝘏𝘌́𝘙𝘖𝘌 𝘋𝘌𝘓 𝘈𝘚𝘗𝘌𝘙𝘎𝘌𝘙

CAPÍTULO 14:LA CLAVE DEL OBJETIVO

Pasaron varios días desde que Isaí empezó a hacer todo ese asunto de los descubrimientos tecnológicos de cualquier cosa relacionado con el entretenimiento, a saber, de videojuegos, mangas, animes, series, películas etcétera; pero a pesar de ocupar su tiempo en eso, aún no ha hallado una respuesta acerca de cómo actualizarla, pero en su época; después de andar muy pensativo sobre este asunto, estando el en su cuarto, se sale de la misma para irse a la sala.

E Isaí tras estar en la sala, iba a sentarse sobre el sofá, pero vio a su padre, reparando una laptop que su cliente le dejo a su cuidado; entonces, en lugar de acomodarse en el sofá, Isaí se levanta y va donde está su padre haciendo eso; una vez estando en dicho lugar, empieza una conversación de Isaí y su padre:

—¡Hola Papá! —dijo Isaí en son de saludo mientras lo ve trabajando

—¡Hola hijo! —respondió el señor Tlapale

—¿cómo estás? —añadió Isaí

—¡Estoy bien, hijo; aquí reparando esta laptop que me dejo un cliente! —respondió el señor Tlapale; y en seguida, Isaí se pone a ver como repara la laptop:

—¡Órale! —dijo Isaí sorprendido—se ve espectacular esos circuitos digitales que abarca todo el sistema de la computadora, los dientes para conexión de chips y diversos alambres para otros conectores—

—¡Así es, hijo! —dijo el señor Tlapale

—¡Se ve genial lo mucho que ha avanzado la tecnología últimamente, hasta ahora! ¿verdad Papá? —dijo Isaí

—¡Si! —respondió el señor Tlapale asintiendo la cabeza; y de paso, continúa arreglando la laptop; y seguido, Isaí prosigue con esa platica con su padre:

—Por cierto, Papá; mientras estas reparando la laptop, quiero platicarte de algo muy importante—

—¡Adelante, hijo! —añadió el señor Tlapale

—¿Te acuerdas que cuando era niño, comprabas consolas diferentes de videojuegos para que yo jugara? —pregunto Isaí

—¡Si, hijo! ¡Claro que me acuerdo de eso! —respondió el señor Tlapale

—Pues... hace unos días me puse a ver los gráficos de los sprites de los personajes de videojuegos de los 80 y los 90; ya sabes, Multiman, Super Emilio Bros. La leyenda de Hulda: la harmónica del tiempo etcétera, unos clásicos de su tiempo—dijo Isaí

—Aja— respondió el señor Tlapale—¿y luego, hijo?

—Y descubrí algo que nunca antes me había percatado—añadió Isaí

—¡qué descubriste, Isaí! —pregunto el señor Tlapale

—Ya ves que, en el boceto de las portadas de los videojuegos en la década de los 80, lanzados en Japón, la paleta de colores de los personajes, pintados e impresos son más de 21 colores por personaje en este formato; mientras que los sprites o fotogramas de animación de los personajes en la pantalla es muy limitado, llegando a ser de 3 a 5 paletas de colores, lo cual, contradice o no son 100% fieles a los bocetos originales; y según los desarrolladores, se debe a las limitaciones tecnológicas de aquella época—dijo Isaí

—¡Así es hijo! —respondió el señor Tlapale —es porque en esta época, no había tanta abundancia de gigabytes para que la paleta de colores de los sprites o como ellos les llaman a los monitos que aparecen en la pantalla como hoy; por esta razón así lo hacían ellos (Antes de proseguir con la historia, añadiré una información acerca de lo que es un gigabyte; Un Gigabyte, también conocido como GB por su abreviación, es una unidad de almacenamiento de información estandarizada, y esta, se suele usar en el ámbito computacional, ese tipo de unidad computacional, tiene ventajas en el diseño de hardware y software a la hora de desarrollar computadoras; por esta razón, el señor Tlapale le explico del por qué así son las cosas en el ámbito tecnológico), porque conforme iba creciendo la tecnología, sus avances básicos, en el caso del diseño de los personajes en esa época en sus pantallas estaba muy limitado—