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Tres semanas después Tn hoy regresaba a España, esas semanas la pasamos increíble, hicimos un viaje a mi ciudad, fuimos todos.
Nos quedamos en la casa que mis padres tienen allá, fuimos a bucear, bueno, solo Jimin y yo, las chicas y Hao no sabían hacerlo.
También pasamos una noche en el Yate, solo mi chica y yo, quería regalarle los mejores días, pues no la vería hasta las próximas vacaciones.
Al volver a Seúl la llevé a cenar, quería pasar el mayor tiempo con ella, se que ahora sería muy tormentoso estar lejos de ella.
— Cuídate, y nos veremos pronto.
— También cuídate kookie, llámame a cualquier hora.
— Lo haré princesa, aish!, no quiero que te vayas.
— Tampoco quiero hacerlo, dime qué me quede y lo hago.
— No haré eso, debes terminar tus estudios en España, falta poco para que termines.
— Un año y medio, es mucho tiempo —me abrazó.
— Esto será más difícil para mi, más de lo que pensé —reí.
Llamaron a su vuelo y de sus lindos ojos salieron unas lagrimas, las cuales sequé con mi pulgar.
— Te amo amor, cuídate mucho —dije.
— También te amo y mantente alejado de esa Mía, que sé que te mira diferente.
— Tu eres la única a la que amo, jamás te cambiaría por nadie princesa.
— Bien, confío en ti amor.
— No tienes que dudar de mi, créeme que ya cambié, y lo hice por ti.
— Te creo Kookie, y gracias por esas lindas vacaciones —sonrió.
Se despidió de sus amigas, de Jimin y de su mamá, al igual Hao, se despidió de todos nosotros.
Los vimos irse por la puerta que les tocaba, sin mirar atrás ella se marchó, el único que volteó fue Hao, y nos dijo adiós con su mano.
Finalmente los perdimos de vista y caminamos hacia la salida del aeropuerto.
— ¿Y MingHao? —llegó el chico de aquella noche.
— Se acaba de ir —respondió Jimin.
— No puede ser, no puede ser —repetía una y otra vez.
— Cheol, ¿lo alcanzaste? —llegó otro chico.
— No Jun, se ha ido.
Esa escena me recordó a cuando Tn se fue la primera vez, Jimin, las chicas y yo nos miramos, todo esto nos parecía familiar.
— Se como te sientes, también viví esto hace meses, solo te puedo decir que tengas paciencia —dije.
El chico me miró con lágrimas en los ojos y solo asintió, su amigo lo tomó del brazo y lo ayudó a levantarse.
— Vamos Cheol, debes darle tiempo.
— Lo sé, pero siento que lo pierdo.
— Eso no pasará, anda vamos a casa.
Los chicos finalmente se fueron y nosotros después de ellos.
— Wow, eso me recordó a ti Jeon, cuando viniste a buscar a Tn pero ella ya se había ido.
— Lo sé, sentí pena por él.
— Así como nosotras sentimos pena por ti —se rió Jisoo.
— Tonta—reí.
Estando fuera del aeropuerto Jimin y to nos fuimos en mi coche y Jisoo con Lisa y la madre de Tn.
— La vas a extrañar ¿verdad?
— Oye, hasta la pregunta ofende —reí— Si antes la extrañaba no siendo novios, ¿imagínate ahora?
— Lo sé, me gusta Jisoo —soltó de repente.
— ¿Que? —frené el auto bruscamente.
— ¿Recuerdas que tuve una aventura con una chica de contabilidad?
— Si, no me digas que es Jisoo.
— Así es, Jisoo y yo tuvimos una aventura, pero así como tú la perdí.
— Es momento de remediar eso y le confieses todo.
— Eso haré, solo estoy buscando el día correcto.
— Solo no tardes Jimin.
— ¿Y si me rechaza?
— Antes que nada debes pedirle una disculpa por cómo la trataste en ese entonces, después dile tus sentimientos hacia ella.
— Me gusta tanto —sonrió como bobo.
— Si dices que te gusta tanto, ve y búscala ahora, es un buen momento Jimin.
— Déjame en su casa, ahí la esperaré.
— Bien.
Cambié de dirección y ahora estábamos por llegar a casa de Jisoo, ella aún no llegaba, así que ahí la esperará.
— Suerte amigo.
— Gracias Kook, lo necesito.
— Todo saldrá bien —sonreí.
Nos despedimos y me dirigí a mi casa, sentía un vacío no tener a mi chica a mi lado.
