—Dile hola, mi amor —le dije a mi bebé que estaba en mis piernas.
—Hola, Meli —saludó Junior del otro lado de la línea—. Hola, mi amor.
Puse a la bebé en la cámara para que la viera, pero ella estaba distraída jugando.
—Ya la veo más gordita.
—Mucho —respondí, tomando el teléfono—. El doctor dijo que está gordita de más, se parece a su papi.
Sonrió.
—Las extraño mucho, mi amor —dijo triste—. Casi diario las sueño y despierto bien agüitado.
—Ay, mi nene, yo a ti —contesté—. La casa se siente enorme, me la paso hablando sola con Mel.
—Yo ando igual —lo vi acostarse—. Extraño platicar contigo todas las noches, me aburro aquí porque nadie me entiende.
—A veces pasan muchas cosas chistosas y quiero contártelas, pero no estás aquí.
—No sabes cómo me da coraje no estar yendo a las consultas de Mel —contestó—. Apenas va un mes y ya estoy como loquito aquí, extrañándolas.
Suspiré y acomodé mi celular en el buró para que me viera mientras me aplicaba mi rutina de noche.
—Sabes que me he dado cuenta —lo miré por la pantalla—. Que lo que más extraño de ti son justo esas cosas chiquitas.
Lo miré extrañada.
—Nunca pensé que extrañaría algo tan simple como verte maquillarte, verte cocinar, jugar con mi bebé —sonreí—. A veces me quedo pensando en que ojalá estuvieras aquí y así mejoraría todo.
Lo miré con ternura. Quería llorar porque en mi cabeza siempre estaba pensar: "Si mi Junior estuviera aquí".
—No, mi amor, pero tienes que disfrutarlo —dije evitando mirarlo para no llorar—. Es algo que te gusta mucho.
—Pero después de estar con ustedes, nada se compara —contestó—. Eso sí es lo que más me gusta.
—Conforme más pasa el tiempo, es menos lo que falta para que estemos juntos de nuevo.
—Solo espero que Mel no haga nada nuevo mientras no estoy.
—No te preocupes, ya hablé con ella y me dijo que detendría su desarrollo hasta que llegaras.
Rió levemente.
—Ah, cómo te extraño, mi amor —volvió a decir—. Y apenas va un mes a la verga.
—Es que deja de martirizarte o te vas a desanimar solo, amor.
—Pues te extraño mucho, ¿qué quieres que haga? —se quejó—. ¿Ya te vas a dormir?
Asentí.
—Tengo que dormir a Mel ya —contesté cepillando mi cabello—. Y después voy yo, fue un día agotador.
—Me imagino.
—¿Tú qué harás?
—Me invitaron de after pero no quise ir, quería hablar contigo.
—Y si los alcanzas? —negó.
Suspiré. Odiaba verlo tan decaído. Desde que se fue, me llamaba a diario triste para decirme cuánto nos extrañaba.
—Ay, mi amor, si yo pudiera tomaría un vuelo en este momento para ir a abrazarte —dije sentándome y tomando el celular—. Odio verte así.
—Es que estoy bien enamorado de ti.
![](https://img.wattpad.com/cover/360083009-288-k680362.jpg)
ESTÁS LEYENDO
la cherry; junior h
Fiksi PenggemarTodas las personas se cansan. Junior lo sabía y aun así continuó lastimando a quien estaba seguro que era el amor de su vida.