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HueningKai después de haber terminado la universidad en el extranjero, había tenido que regresar a su país natal, bueno, la verdad no era su país de origen pero al menos era donde había llegado a pasar la mayoría de sus años de vida, por lo cual el menor había vuelto a su rutina cotidiana dentro de la enorme mansión de su tutor, por que muy después de todo era lo único cercano que llegaba a tener de una familia, por lo cual aquella mañana después de haber desayunado tuvo la enorme necesidad de ir a dar un pequeño recorrido a lo que vendría siendo la biblioteca más grande que tenía aquella casa, por lo cual en aquellos momentos estaba sumamente interesado en oír lo menos encontrar algún buen libro con el cual encontrar alguna clase de sustento pata su reciente investigación, a la cual quería entregarle a su tutor para que este pudiera comunicara en algún segmento de su programa de radio, no perdía la más mínima esperanza de que aquello pudiese llegar a pasar en algún momento de su vida, por lo cual ahora no creía que pudiera llegar a perder la más mínima esperanza de lo que el estaba haciendo, y de lo que su tutor podía llegar a encontrar en el, suspiró con algo de fuerza a la misma vez en la que veía a través de el enorme ventanal qué se encontraba frente a él, debido a que la escasa luz de el sol aquella mañana era lo único que iluminaba dentro de toda aquella habitación en cuestión, más aún así de alguna manera no podía llegar a negar en lo más mínimo que muy a pesar de que el se seguía esforzando día con día a poder llegar a tener alguna clase de buena información o alguna investigación semejante pata que su mayor finalmente pudiera llegar a colocarle alguna clase de atención al respecto, aún así sabía que jamás se sentiría del todo satisfecho con lo que hacía o e incluso con lo que escribía, por lo cual todo lo que investigaba nunca se lo enseñaba, por que al final creía que no llegaba a ser del todo a la altura de lo que BeomGyu esa ataba acostumbrado a tratar de alguna u otra forma.
Por lo que ahora, estando encerrado en aquellas cuatro paredes mientras leía un libro que le había logrado llamar la atención aquella vez, miro hacia arriba, en el cielo, pensando en el como podría llegar a estar a la altura de su amado tutor, por que, no negaría que a pesar de que este tenía que ser para el, como un padre, sabía y era plenamente consciente de que entre ellos no existía el más mínimo vínculo sanguíneo, y la crianza fue meramente amabilidad de él mayor el cual vivía solo y no tenía con quien crear una familia, talvez por aquello lo había ayudado, pero no le importaba, por que después de todo aquello no le había llegado a hacer cambiar en lo más mínimo el enorme hecho de saber que, el, de alguna forma, hubiese comenzando a desarrollar sentimientos románticos hacia el, verlo de una forma en la que sabía muy bien que talvez no se encontraba del todo bien hacerlo, pero, el sentía que no estaba mal amar a alguien que no tenía alguna clase de conexión sanguínea consigo.
Si talvez lo había criado, le había dado techo, comida, cama y una muy buena educación cuando menos pensó que lo tendría en algún momento, pero, no tenían nada más que ella, el lo veía como una persona a la cual el era capaz de llegar a amar fielmente por el resto de su vida, incluso si llegaba a ser del todo un secreto de él cual solo el llegaría a ser del todo conocedor.
