—¿Namjoon besa rico?
Preguntó Jimin indiscretamente mientras ponía spray fijador en su cara, Jungkook casi se ahoga con él.
Estaban en su habitación compartida con SeokJin haciendo su maquillaje y cabello antes de encontrarse con el entrenador y el resto de su equipo de cuidado para ir al Gimnasio Ariake, donde competirán. No es como si no fuese a desaparecer mientras sudaban esas tres horas y media de competencia pero podían lucir bonitos al menos al principio, eso siempre insiste Jimin.
—¡Dime! Siempre he querido saber
—Muérete de la curiosidad —Le arrancó el spray y le rocío un poco para apartarlo. Jimin busco otro y comenzó una guerra entre amenazas falsas y risas, eso hasta que SeokJin les gritó que se detuvieran porque no iba a alcanzar para él –tenían dos botellas más– aún así pararon.
—Relaja tu culo posesivo —Jimin se burló riendo ligeramente y volviendo a tomar un pincel pequeño para terminar el maquillaje natural en sus ojos. —¿Es o no?
—Es jodidamente bueno —Admitió Jungkook orgulloso cerrando los ojos para permitirle a Jimin trabajar —Y no es lo único que sabe hacer bien con su boca.
—¡Joder! —Jimin prácticamente se cayó de la silla –que habían metido forzosamente al baño– mientras reía y aplaudía haciendo un escándalo. —¿Crees que pueda enseñarme?
—Primero me tienes que matar a mi —Respondió buscando cualquier cosa para lanzarle, siendo un cepillo de peinar que Jimin esquivó fácilmente. Finalmente volvió junto a él y continuó su trabajo.
—Estoy muy feliz por ustedes —Dijo Jimin con la sonrisa dulce que no abandonaba su rostro, una que agradecía mucho. Jungkook no podía creer que existiera alguien tan dulce con todos. Namjoon era una persona muy dulce también, pero con un círculo selecto de personas. —No tienes idea lo adorables que son, todo el tiempo gravitando alrededor del otro con esa sonrisa boba, nunca había visto a Namjoon así, me emociona mucho.
Jungkook sintió sus mejillas arder pero una sonrisa orgullosa cruzó su rostro, claro que eran adorables.
—¿No es lo mismo que hacen Hoseok y tú?
Jimin sonrió hasta que sus ojos desaparecieron.
—Exacto, porque somos adorables.
Del otro lado de la habitación Namjoon ayudaba a SeokJin a guardar algunas cosas en su mochila.
—Namjoon —Pronunció SeokJin bajito, sentándose a su lado en la alfombra que él mismo trajo de Corea —Se que no estás cómodo hablando de esto, menos ahora pero solo quería que sepas que confío plenamente en ti, se que cualquier decisión que tomas, la haces con la mejor de las intenciones. Eres el mejor líder que este equipo podría tener, tu trabajo es invaluable así que —Besó su cabello —Por hoy, no tienes que pensar en nada más.
Los hombros de Namjoon se relajaron instantáneamente.
—Gracias, hyung.
El equipo llegó tranquilamente a Ariake. Su turno era desde la 1 de la tarde hasta las 4. El gimnasio estaba lleno de atletas estirando y preparándose antes del inicio, las cámaras seguían apagadas.
Jungkook estaba totalmente concentrado y metido en el estado mental, sus músculos se sentían laxos y frescos, en el estómago un hambre de éxito que amaba sentir. Cada momento que había vivido se resumía en estas competencias, era su vida en esas competencias y se sentía tan listo.
Su manager lo llamó temprano esa mañana y finalmente contestó, había estado ignorando sus llamadas desde que llegó a Tokyo y dedicándose a ser feliz pero no las podía evadir más. Dijo que lo esperaría en las gradas más altas antes de las competencias y, por primera vez en mucho tiempo, tenía miedo de enfrentarlo.
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The one prize (I'd cheat to win) [namkook]
FanfictionEl equipo masculino de Gimnasia Artística de Sur Corea sufre la pérdida de un miembro antes de las Olimpiadas y un nuevo integrante altera su sinergia. Ahora no solo se enfrentaría a los equipos internacionales, también tenía que superar las grietas...