La directora regreso tras una semana de viaje a Rusia. Había dejado a sus agentes al cuidado de Wesker hasta nuevo aviso, con la esperanza de que todo estuviera bajo control en su ausencia.
Pero para su desgracia, recibió una urgente llamada de sus superiores rogándoles que volviera lo antes posible, lo que le indicó una sola cosa: la situación se estaba saliendo de control.
La llamada de sus superiores había sido clara, le ordenaron que comenzara a meter mano dura, sin importar las consecuencias. Le dieron paso libre a hacer y deshacer con cualquier obstáculo en su misión.
Ya que si en Marbella hacían lo que se les diera la gana, tendrían que actuar de la misma manera si querían limpiar la ciudad cuánto antes, pero Dominique no hacía las cosas de esa manera, toda su vida ha estado del lado legal, así que no se mancharía más las manos.
Marbella siempre ha sido un hervidero de problemas, donde el crimen y la policía hacían lo que se les viniera en gana y su principal misión era erradicar todo el mal de ese lugar.
Subió a su coche para comenzar a dirigirse a las instalaciones, se detuvo en un semáforo en rojo y observo como varios autos pasaban a toda velocidad frente a algunos policías, quiénes no hacían nada para detenerlos.
Algo normal en Marbella, según Wesker.
La ciudad siempre ha sido un hervidero de problemas y todo aquel que pisaba esas calles se corrompían, no importaba cuan buena fuera esa persona, la llevaban por el mal camino.
Estacionó el vehículo frente a las instalaciones del SNI. Miro hacia la gran puerta y respiró hondo para relajarse antes de bajar del auto. Sabía de sobra que al cruzar aquella puerta comenzarían los dolores constantes de cabeza.
Ahora solo tenía que averiguar que coño había ocurrido mientras estuvo fuera de la ciudad.
Entro al edificio haciendo que las voces de los agentes en la recepción se extinguieran al notar su presencia. Ignoró las miradas y murmullos para subir las escaleras e ir hacia su oficina, sin embargo una gran carcajada rompió el silencio que mantenían los agentes.
Esa risa era facil de identificar, provenía del agente más alegre que había conocido hasta el momento: El joven Armiche.
Salia de la sala de reuniones de al lado, junto a Márquez y Wesker.
La directora frunció su ceño al no entender por qué se reía con tanto escándalo y le daba algunas palmadas en el hombro a el ojos claros como si se estuviera burlando de algo.
Wesker detuvo su caminata al notar el inesperado rostro de la cabello oscuro, Armiche dejo de reírse y miro hacia donde miraba el pelinegro y se encontró a una Dominique con una expresión confundida.
El silencio volvió a caer nuevamente, la pelo corto había olvidado el pequeño detalle de que los cuatro estaban en malos términos antes de su viaje, y la verdad es que luego de hablar con Marcos e irse por temas personales a Rusia, la idea de dejar el SNI comenzaba a rondar por su cabeza, así que le había restado importancia al pequeño desacuerdo con sus agentes.
Dominique alzó una ceja al notar que los tres iban vestidos de GEOS. Tragaron saliva al ver como aquellos ojos dorados los miraban de pies a cabeza, escaneandolos.
—¿A dónde van? —Rompió el silencio, al notar que ninguno tenía intenciones de hablar.
Armiche comenzó a reírse nuevamente, la mirada de Dominique sobre Wesker le pedía alguna respuesta sobre el porque el castaño se reía con tanto esmeró.
—Ehh... —Dudo un momento antes de responder—. La pregunta es de dónde venimos.
—De la guerra —Respondió Armiche.
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Eyes For You (Domisker)
FanfictionDominique es una mujer íntegra, pero su pasado la persigue. Las acciones que hizo en el pasado han regresado para atormentarla, llevándola a comportarse de maneras que pensaba haber dejado atrás. Aunque lucha contra estos impulsos, porque teme volve...