Marinette se colocó su ropa nueva, estaba terminando de vestirse con su nuevo estilo. Se vio en el espejo y sonrió, la verdad era que le gustaba mucho, excepto por un detalle.
—Creo que la cintita en el cabello es demasiado, no me convence —entonces se la quitó. Tikki se acercó y la tomó, poniéndosela en una de sus antenas —. A ti se te ve muy linda.
—Gracias, yo amo tu nuevo estilo, Marinette —respondió emocionada la Kwami —. ¿Te sientes preparada para el primer día de clases en un nuevo colegio?
—Sí. Me consuela saber que Alya y yo estaremos en el mismo salón, al menos tendré a mi mejor amiga conmigo —respondió sonriente —. Estaba acostumbrada a estar con ella y con Adrien y Nino, pero al menos podremos seguir viéndonos en los recreos, seguirá todo igual —ella estaba tratando de convencerse.
Sus padres vieron su nuevo estilo y se emocionaron al ver lo grande que estaba su pequeña, se emocionaron y la abrazaron.
—Siempre serás nuestra niña, Marinette —dijeron al unísono. La azabache sonrió, conmovida.
—Las cosas están cambiando, es un nuevo colegio, por eso necesitaba un nuevo estilo —les explicó —. Aunque sigue teniendo mi esencia.
—Aunque hay cosas que nunca cambiarán —Tom le entregó una caja con macarrons, como hacia cada año.
*
Alya y Marinette se vieron y ambas se abrazaron y después comenzaron a gritar.
—¡Te ves increíble! —exclamaron.
—¡Tu ropa es cien por ciento tú! —exclamó Alya —, siempre supe que eras una gran diseñadora, pero está ropa definitivamente demuestra todo tú estilo, ¡eres increíble!
—¡Tú cabello se ve grandioso! Con ese corte se ven mucho más tus ondas, ¡te ves increíble!
Adrien estaba con Nino, como siempre Nino estaba hablando sin parar. Entonces, Adrien se desconcertó al ver a Marinette. Tal y como ella le había dicho (al felino), había ido con su nuevo estilo. ¡Y le quedaba increíble! Se veía muy guapa, resaltaba mucho. La combinación de colores, el negro con rosado realmente se luce. Adrien no podía dejar de verla, puede que llevará el mismo peinado de siempre, pero se veía bastante distinta, muy hermosa. Quería besarla, pero no podía... esos besos le pertenecían al Gatito coqueto, no al "aburrido Adrien".
—Hola, Adrien —la azabache lo saludó —. Me alegra verte después de tanto tiempo —le sonrió. Él se sonrojó, amaba su voz —. Hola, Nino...
—¿Ya no te gusta Adrien o qué? ¿Desde cuándo puedes hablar con él de modo tan normal? —preguntó Alya sorprendida, incluso su rostro la delataba.
Marinette suspiró. Observó a Tikki y la Kwami simplemente asintió, eran mejores amigas y Alya conocía su verdadera identidad, Alya tenía derecho a saber cosas.
—Alya, estoy saliendo con Chat —soltó —. Nos hicimos novios en las vacaciones y ha sido toda una aventura.
—Agradezco que nos tocó en el mismo salón, porque ahora mismo ¡me contarás todo! —Alya la tomó del brazo. Sacó un macarrón, lo devoró y comenzaron a caminar al salón para elegir sus asientos, se sentarían juntas. Marinette simplemente se dejo arrastrar. Esa sería una larga tarde.
*
Esa noche, Chat Noir apareció.
—¿Decidiste venir un lunes, Gatito? Eso es nuevo.
—Princesa, tenía que verte —el felino la vio y finalmente pudo sonreír, ahora podría decirle los cumplidos que ella merecía —. Te ves muy linda. Esa combinación de colores es hermosa, el rosado resalta mucho. La verdad, eres una diseñadora increíble.
—Gracias, Gatito —Marinette sonrió complacida —. Muchas gracias por tus cumplidos, los valoro mucho.
—Tienes que valorar tú talento, porque todo esto es gracias a ti, tú eres la talentosa —y finalmente pudo besarla, después de haber aguantado las ganas durante toda la tarde.
Adrien aguantando las ganas de acercarse a su novia, jajaja, me encantó escribir esto. El primer día de clases siempre da un poco de miedo, ¿no? Yo vuelvo a clases el cinco de agosto, estoy nerviosa por saber cuántos compañeros seguirán y cuántos chicos nuevos habrá...
