Miedo al rechazo ; Enzo Fernández (EN PAUSA)

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Parte 2/2

Maggie bajó riéndose junto a los chicos quien la intentaban distraer un poco del mal momento que estaba pasando la chica.

La pelinegra sintió su estómago cuándo vio a la morocha abrazada a Enzo nuevamente. Mientras el morocho miraba confundido a su novia quien minutos atrás le había dicho que se sentía mal.

—un bebé!— gritó Valentina e intentó alzar al bebé quien vio a la chica y sé largo a llorar—ay por dios cállate.

Todos la miraron mal por como había tratado a Felipe el bebé de la familia Fernández. El bebé ni bien chocó su mirada con la de Maggie empezó a reír y tirar sus brazos hacia la pelinegra que estaba bastante lejos.

—dale anda, que no ves que el bebé te quiere más que a todos nosotros—Maggie se levanto bajo la mirada sonriente de todos al ver como el bebé la buscaba y lo fue a buscar.

—hola hermoso— estiro sus brazos hacia el bebé y lo tomo de los brazos de Valentina quienes la miraba mal— que pasa?— le preguntó divertida al bebé que la miraba y reía.

Volvió a sentarse entre los hermanos Fernández y se quedó con el bebé que estaba chocho en sus brazos.

—Enzo! Porque el bebé no me quiere?— preguntó irritable Valentina.

—porque será?— susurro Gonzalo haciéndola reír a Maggie.

—es un bebé Valentina—dijo obvio acercándose con una sonrisa a su novia y su primo más chico.

—ningún boludo sos vos— le dijo divertido al bebé quién se reía sin entender ni una palabra—ella es mia.

—mia!— dijo el bebé y todos se miraron, acababa de decir su primer palabra.

Todos empezaron a reír por lo loca que había sido la situación, excepto por Valentina que miraba mal a Maggie.

—el asado ya casi esta!— avisó Raul desde la parrilla entonces Maggie se paro y le dio el bebé a Maximo para ir a ayudar a Marta.

Pusieron la mesa entre todos y cuándo ya estaba todo se sentaron, Maggie intentó sentarse al lado de Enzo pero Valentina le gano y se sentó en el único lugar al lado del morocho. Fue a sentarse a otro lugar pero Rodrigo le cedió su lugar que estaba al lado del menor de los Fernandez.

—ya estás mejor amor?— le preguntó Enzo apoyando su cabeza en el hombro de ella.

—sisi—mintió ella y le dio una sonrisa.

—te amo si?— ella asintió y el le dio un beso.

—enzi me pasas la gaseosa— pidió Valentina en referencia a la bebida que estaba al lado suyo.

—está literalmente al lado tuyo Valentina—dijo Enzo obvio y siguió mirando a Maggie que ya se estaba poniendo nerviosa—porque te pusiste esta remera? Me gustaba más cuando estabas solo con la maya— le susurro cerca de su oído estremeciendo la piel de Maggie.

—tenía frío— mintió ella y Enzo se separó de ella cuando trajeron la carne.

—no comes?— preguntó Enzo cuándo Maggie no se agarró ningún pedazo de carne, solo ensalada.

—no tengo mucha hambre— sé excuso.

—dale, come— el agarró un trozo de carne y se lo sirvió— y si no comes te voy a tener que dar en la boca como a feli— ellos rieron y ella se sintió segura de comer.

Almorzaron en familia (excepto por Valentina), charlaron de todo y le cantaron varias veces el feliz cumpleaños a Enzo quién estaba recostado sobre el cuerpo de su novia haciendo la digestión.

—vamo al agua?— dijo Seba y al toque casi todos los hombres Fernández estaban metidos en la pileta.

—te ayudo Marta— Maggie se levantó y ayudó a su suegra a levantar la mesa y lavar los platos junto a Camila la prima de Enzo.

Cuándo terminaron volvieron al patio y se sentaron en unas reposeras a tomar mates. Valentina se encontraba tomando sol acostada en un pareo en el pasto lejos de todos.

—linda! Veni metete— le dijo Enzo a su novia.

—no enzi! Tengo frío—dijo Valentina.

—le decía a Maggie— le respondió Enzo saliendo del agua.

—Enzo, no!— dijo Maggie riendo viendo a su novio acercarse a ella.

—un chapuzón nomas— le dijo sonriendo alzándola a upa como si no pesara nada.

—te odio!— dijo Maggie saliendo del agua y viéndolo reír a Enzo enfrente suyo.

—y yo te amo— le respondió el dejando un beso en sus labios.

Estuvieron un rato más hasta que salieron y Enzo junto a Maggie subieron a su habitación a cambiarse.

—amor estás bien?— le preguntó Enzo a la pelinegra—te noto mal.

—si, estoy bien— dijo cambiándose desde el baño.

—segura?.

—en realidad no—admitió saliendo del baño— pero no quiero arruinar tu cumpleaños, después hablamos, no te preocupes.

—te amo hermosa, nunca lo dudes— se dieron un beso que Enzo hizo aumentar de nivel— un rapidín?.

—Enzo, esta tu familia abajo, no— se alejó y lo miro desde la puerta el puchero que el le hacía.

—así sos— ella se río y tomo su mano.

—dale caprichoso— el la siguió arrastrando sus pies bufando.

—te amo hermosa— el la hizo dar una vuelta y caminar de espaldas mientras le daba besos cortos en todo el rostro.

—cuidado!— gritó Valentina cuando el cuerpo de Maggie y el de ella chocaron, haciendo que ambas se caigan.

—estas bien amor?— le preguntó Enzo a su novia ayudándola a levantarse.

—si, solo me caí, estas bien?— le preguntó a Valentina extendiendo su mano para ayudarla a levantarse.

—como voy a estar bien? Si me chocaste boluda— ella empujó su mano y se levantó por su propia cuenta.

—bueno Valentina, fue sin querer— interfirió Enzo.

—siempre la defendes a ella, es increíble!— dijo harta y se fue caminando al patio.

Le cantaron el feliz cumpleaños a Enzo y luego de que todos ayuden a ordenar un poco se fueron dejando a la pareja sola nuevamente.

—ahora si podemos hablar?— preguntó Enzo acostándose al lado de Maggie.

—Enzo... lo que paso hoy creo que ya lo debes sospechar pero se trato de Valentina.

—paso algo? Te dijo algo?.

—no, solo qué cuando tu mamá me contó quién era me empecé a comparar con ella y nada— Enzo tomo el rostro de ella en sus manos secando las lágrimas que caían de sus ojos.

—ey, porque te comparaste?, que te había dicho sobre eso?.

—yo se que no esta bien, pero me fue inevitable Enzo, es hermosa y al lado de ella sentí que no se... era muchísimo mejor que yo en todos los aspectos físicos posibles.

—bueno para mi no, para mis ojos sos la más linda de todas y Valentina no te llega ni a los talones— la beso— te amo y me encanta que confíes en mi para decirme todo lo que pasa por esa cabecita.