HOY: LOS CUATRO ELEMENTOS: SEGUNDA PARTE

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NARRADOR OMNISCIENTE

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NARRADOR OMNISCIENTE.

Los chicos seguían intentando desatarse usando el fuego y, aunque parecía sencillo, no lo era. Todo el resto de chicos disfrutaban del pequeño show.

En el microcine, Valeria le daba respiración boca a boca a Juan, para ayudarlo a respirar mejor. Tefi y Melody chapoteaban en la pileta con los chicos del futuro como ellas lo llamaron. Mar y Jaime aún se retorcían por las hormigas en el bar y Pedro movía las manos con la manta para apagar el fuego.

Consiguió apagar el fuego al mismo tiempo que se desataban los chicos en el loft. Les costó más de lo que esperaban, pero pudieron hacerlo.

—Ay, me quemé todo, me duele— Nacho les dijo y frotó su muñeca con una mueca.

Pamela rió —¿Pero no querías fuego, cachetón?

—Sí quiero y me lo vas a dar vos-

—Epa, epa, epa— Maxi lo frenó con una sonrisa de diversión —Que esto no se terminó.

Los chicos lo miraron al escucharlo decir eso.

—No, no, basta, flaco, basta— Tacho le dijo.

—¡Sí, ya fue!

—¿Qué más querés?

—Calladitos, nuevos. Nosotros decimos cuándo es qué fue.

Maxi y Pamela les dieron una señal rápida al resto con la mirada. En menos de cinco segundos, todos comenzaron a lanzarse sobre los bautizados. Estos, en respuesta, se quejaron.

La puerta del loft se abrió de pronto y Camilo miró todo el lugar con el ceño fruncido.

—¡Señores!— exclamó, llamando la atención de los presentes.

Todos callaron al verlo. Él sonrió.

—¿Qué está pasando acá? ¿Bautismo?

Se tambaleó y, entonces, hizo algo que sorprendió mucho a todos; se sumó lanzándose sobre ellos de manera divertida. Todos comenzaron a celebrarlo.

Los minutos pasaban y la fiesta seguía en el loft ya que habían terminado con el bautismo. Camilo era uno más, bailando entre risas y con pasos extraños ya que seguía bastante ido. Kika observó a Rama y, tímidamente, se acercó a él. Sin saber como llamar su atención, hizo lo primero que se le ocurrido, dió un manotazo en la cabeza del rubio.

Rama giró enseguida, con el ceño fruncido.

—¿Qué hacés, loca?

—Tenías un mosquito— respondió ella.

—Ah...

You're On Your Own, Kid || Casi ÁngelesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora