Te encontré || FORTNITE FANFIC

19. Plan de escape.

La noche cayó y la mujer de toque dorado se encontraba sentada en la sala mientras el varón de tatuajes se encontraba en el baño, ella leía uno de sus libros favoritos antes de que el sonido del timbre sonando la sacara de su actividad para con cuidado ponerse de pie, tomar una de sus llaves y salir hacia la reja que rodeaba su casa, sorprendiéndose al hallar ahí a uno de los ex compañeros de quién por ahora vivía con ella, sobretodo porque ya era bastante tarde...

-Brutus... Que sorpresa verte aquí

-¿Marigold?... —se sorprendió al verla lastimada— ¿Qué te pasó?... ¿Te caíste?

-Si, tuve un pequeño accidente en mi motocicleta el día de ayer...

-¿Y te fracturaste?

-No, gracias al cielo no, solo tuve una torcedura, en 2 días estaré como si nada

-Ya veo... Espero que te recuperes

-Muchas gracias, pero bueno, siendo honesta, me sorprende verte aquí, ¿Sucede algo?

-No... Supe que Midas se estaba quedando contigo, entonces vine a buscarlo...

-Claro, ¿Gustas pasar?

-Gracias, pero preferiría que él saliera

-Entiendo... Voy a hablarle

-Mari, ¿Crees que pueda llevarlo a tomar algo para platicar con él?

-Mmmm... —frunció un poco su ceño— ¿Qué clase de "tomar"?

-Jajajaja... —soltó una carcajada algo sonora—¿Temes que te lo traiga borracho?

-Siendo sincera, no me gustaría que fueran a beber alcohol, no hoy... Mañana tenemos trabajo y no quiero que esté mal

-¿Segura que solo es por trabajo?

-No me gusta que tome alcohol

-Lo sé y no deberías preocuparte tanto, como sea sabes de sobra que a él no le gusta beber y cuando lo llega a hacer, solamente es en momentos específicos, pero si te hace sentir más segura, no lo llevaré a beber, íbamos a ir por un café

-¿A esta hora?

-Si, casi es media noche, pero hay una gasolinera 24 horas que vende unos descafeinados muy buenos, si quieres te traemos uno...

-Descuida, está bien, salgan...

-Te prometo tratar de no regresartelo tan tarde y si nuestra plática se alarga mucho, lo llevo a mi casa y que ahí pase la noche, para que no te preocupes...

-Bien, como sea no puedo negar esta salida aunque no esté tan segura de esto...

-¿Por qué no estás segura?

-Siempre que Midas y tú salían era para robar... Les encantaba hacer eso solo por diversión

-Todo estará bien, te lo juro

-De acuerdo... Cuídalo... Sé que él sabe protegerse bien, pero no conoce la isla y tampoco todo lo que puede haber, no quiero que algo le pase

-Tranquila, Mari...

Se escuchó una tercera voz en la conversación, causando que la mujer volteara al origen de la misma, viendo a su semejante, quien se acercó a ambos...

-Estaré bien, solo saldremos a platicar

-Midas, ¿Cuánto tiempo llevas ahí?

-Lo suficiente...

-Supongo que no debo de decir que quiere Brutus, ¿O si?

-No, lo oí

-Bien... Ve con cuidado...