Justo a tiempo

Prólogo

Hubo un momento en mi vida donde todo parecía un laberinto sin salida. 

Cada decisión parecía llevarme más lejos de mí misma.

Me perdí por las corrientes del mundo.

Mi corazón estaba herido, hecho pedazos.

Mis sueños se desmoronaban como castillos de arena frente a la marea.

Llegó un punto en el que la chica que solía ver en el espejo ya no se parecía a mí.

Mi vida estaba hecha un total desastre.

 Todo, absolutamente todo parecía perdido.

Estuve a punto de cometer el peor error de mi vida.

  Hasta que llegó él.

 Justo a tiempo.

 Como un héroe en un cuento de hadas.

 Como un capitán que guía su barco a través de las aguas turbulentas.

 Como el primer rayo de sol después de una larga noche. 

Como un arquitecto que restaura las ruinas de un pasado doloso.

 Como el sanador que venda las heridas más profundas del corazón y reconstruye cada parte de el.

 Como el músico que trae armonía a una melodía discordante.

 Como el artista que transforma el lienzo en blanco de cualquier existencia en una obra maestra.

Como el alfarero que, con manos expertas, da forma a una vida rota y esperanzas perdidas, transformándolo en piezas de increíble belleza.