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Buenas noticias.

Un Dios que escucha oraciones y hace milagros.♥

En estos días de espera por noticias sobre la operación de mamá, he estado mayormente en casa. Evan ha sido un apoyo constante; siempre está ahí, ofreciendo su ayuda y su compañía. Aunque admito que estoy empezando a sentir cosas por él, ahora no quiero distraerme con pensamientos personales. El enfoque está en mamá y su recuperación.

En el colegio, Zara parece mostrar más preocupación por mí. Ha estado más cercana, preguntando cómo estoy y cómo sigue mamá. En cambio, Amber no ha asistido a clases últimamente, lo cual es bastante inusual. No he sabido mucho de ella desde que dejó de venir.

Niko sigue con su grupo de amigos y, de vez en cuando, intenta molestarme, pero he aprendido a ignorarlo. Mis energías están en otro lugar, concentradas en mamá y en mantenerme fuerte para mi familia.

He estado ocupada haciendo la carta que nos pidieron en el grupo de apoyo espiritual. A cada uno nos tocó escribir una carta a alguien especial de manera personalizada. A mí me tocó escribirle a mi hermana Raven. La idea es llenarla con palabras de aliento y cariño, un mensaje que le dé fuerzas y esperanza. Es un proceso emotivo, pero sé que será significativo para ella.

Al finalizar este mes casi lo hacemos debemos entregarlo.

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Hoy era el día de la operación. Estaba nerviosa. Acompañada por mi hermana Raven, vi a Evan y a Violett en la sala de espera del hospital. Para mi sorpresa, Zara también estaba allí. Le agradecí sinceramente por venir, sintiéndome tranquila por su apoyo inesperado.

La operación comenzó y nos sentamos en la sala de espera, esperando ansiosamente. De repente, el miedo me invadió y comencé a llorar. Evan me abrazó fuertemente, permaneciendo a mi lado con una calma tranquilizadora.

Después de tres largas horas, finalmente salió el doctor. Nos reunimos todos, expectantes. El doctor habló con una sonrisa en su rostro, diciendo: "Chicos, como doctor les digo que estoy totalmente sorprendido. La operación resultó no ser tan complicada como esperábamos. En las placas vimos algo increíble: las partes del cuerpo que antes estaban afectadas por el cáncer... ¡están limpias! El cáncer inexplicablemente ha desaparecido del organismo."

El alivio inundó la sala. Mamá estaba bien. Aún necesitaba descansar y recuperarse, pero la noticia fue más de lo que podríamos haber esperado. Nos abrazamos, compartiendo lágrimas de alegría y gratitud. Todos los momentos difíciles y las preocupaciones de los últimos tiempos parecían disolverse en ese momento.

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