Las secuelas del pasado siguen atormentando a T/N, como si fuera un renacer,un patético renacer.
Viviendo una vida que no le pertenece,pero pagando los precios de sus pecados.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Siendo un aburrido sábado,T/N despertaba con pesadez en la habitación de König,ya no se encontraba,pero al levantarse y pasar su mirada por la habitación,el reloj de la mesa de noche marcaba las 2:34 de la tarde,siendo bastante tarde incluso para ella que le sorprendió,en el pasado solía despertar tarde incluso en los entrenamientos,rozando la delgada línea a qué la expulsaran por indisciplina,pero ahora tenía una excusa de verdad,al regresar de Urzikistan,su ánimo se encuentra indeciso,como si estuviera en un aburrido bucle.
Su estómago rugía con fuerza,fue hay donde se dio cuenta que había una nota en la cama de König a la cual se hacerco para tomarla y leerla;
‹Salí de misión,si todo sale bien regresaré en la noche ›
Firmada por su nombre y una carita feliz algo torcida.
Sin nada más que hacer,se vistió y salió de la base,tomando un taxi y llendo a la ciudad cercana,la verdad es que entre la base y la población no había mucha distancia,al llegar pago y bajo en una calle cualquiera y mirando cualquier escaparate que le llamaba la atención,aunque ninguno despertó totalmente su curiosidad y llegó a una cafetería familiar,el menú era sencillo,por lo que solo pidió unos pancakes y café.
Mientras la comida trababa en llegar,la gente que entraba la miraba con sorpresa,y los niños en silencio la señalaban y murmuraban,siendo reprendidos por alguno de sus padres,T/N se preguntaba el porque de la atención,pero al recordar cierto incidente en su rostro,no hizo más que desviar la mirada con vergüenza,coibiendose de querer gritarle a la gente más adulta por su groceria,a los niños no tanto tomados en cuenta, porque son niños,su curiosidad aveces parece grosera pero es pura,sin embargo la mirada de los adultos era más pesada,quien sabe que estarían pensando de ti.
—Aqui está señorita,estoy a sus servicios.—Una mesera llegó con el pedido.—¿Gusta ordenar algo más?.—al ver qué T/N no le dirigió la mirada,se preocupó genuinamente por ella—¿Te encuentras bien?.
Esa temerosa joven,volteo a verla con preocupación por como reccionara,pero lo que hizo la mesera realmente le conmovió.
—Entiendo...¿Te sientes incómoda?, Acompañame,tenemos cabinas para mañoe privacidad.—tomo su pedido nuevamente en la bandeja y con paso apresurado se acercó a las habitaciones con cortina que había al fondo del establecimiento,movió una cortina y le dio paso a T/N para que tomara asiento en una cómoda mesa para dos,era una cabina algo pequeña,pero silenciosa y acogedora,de un lado tenías la cortina y del otro un cristal doble cara,poder ver el exterior sin que te vean a ti.—Si necesitas cualquier cosa solo toca la campana ^^.
Y sin más se fue.
La paz que sintió en ese momento le trajo la energía y ánimo por completo,sintiendo un alivio en pecho procedió a comer su dulce almuerzo y apesar de aver terminado,la atención al cliente de la chica le dio la suficiente energía como para tocar la campana y pedir algo más caro del menú,volver a verla le hacía sonreír,era de las pocas personas que parecía entender su condición,su silenciosa condición.
