Soy Mística Y éste es mi desahogo.

Estimada y anodada.

Querida Frida, fuiste y siempre serás una mujer grandiosa por si nunca lo supiste. Pienso exactamente lo que mencionaste en tus escritos, en el que decías que no sabrías que otra mujer podría tener  un gusto tan horrible como para fijarse en Diego Rivera. ¿Qué ocurre Frida? Nos encarcelamos en palabras y  en esas bellísimas flores que pintaste en uno de tus cuadros que el te regaló y con ella te enamoró y yo me pregunto ¿Por qué no nos enamoramos de la flor? Si es ella la  que contiene el aroma, textura y color y además es utilizada para engatusar una sensación (si hasta pena me dan las flores, son una preciosura y se utilizan, se lanzan en las bodas y se arrancan como si fueran a crecer en segundos)

El comienzo de hacerte sentir magnífica y luego minimizarte cuando te vio brillar, al ver que traspasabas su muralismo( no minimizo el tremendo artista que fue). Pero sin duda TÚ fuiste un resplandor en cada autorretrato... erás auténtica, icónica, bella y reflectante, y creeme que en tu abierta relación con diego yo me hubiera acercado a tí, porque una mujer como tú  es alucinante ante mis ojos.

Querida Frida khalo, fuiste esencia y espíritu y me veo ante aquel  cuadro que coloreaste con  cuchillos y espinas  en tu cuello y brazos.

¿Sabes? Creo, que todxs hemos tenido un amor que nos ha crujido, tal como Diego contigo, que nunca te dejó de estrujar de dolor tu corsé de yeso, hasta que diste tu último  suspiro que apuñaló tu dulce corazón. Pienso y me replantéo que  nunca jamás existirá  ese único e inquebrantable amor en cada uno de nosotrxs que  se querrá desligar de las venas de nuestrxs corazones, porque simplemente está conectado con nuestros más profundos y sinceros  sentimientos.

Te minimizaste, complasiste, y te confiero mi admiracion a tu más poderoso autorretrato "Las dos Fridas".  Te fuiste, dejando a quien más amabas porque decidiste amarte más a tí.

Frida, me siento tu tercera Frida...
Es que no puedo callar.
Es que no puedo ocultar.
Es que no puedo dejar de opacar mi deseo de mujer.
Y ...
Es que simplemente no puedo dejar de ser una alma
fugaz,
oleada e infrenable.

Soy incontrolable, voy con el tornado y no le temo Frida y es que hay tantisimas veces en las que digo calma calma pero la calma no me viene, es más soy yo quien desvanece la calma. Soy energía, mucho amarillo limón y un tan incierto azul eléctrico que pide vivir todo lo que no recuerda haber vivido. No pido deseos, porque sé que todo lo lograré, para mi todo es posible si me lo propongo Frida. Logré salir de un túnel, y en ese entonces yo no tenía garras ni fuerzas para guiar y pedalear su camino para llegar a una pequeña luz y llegue. Entonces te digo, si yo pude hacer eso, puedo hacer todo en esta vida, absolutamente todo, al igual que tu... Jamás dejaste de autorretratar tu pasión y si que es una guerra.

Algún día llegaré a México y pisare tu casa y no quisiera ni imaginar como sería porque comenzaría ya a alucinar.

Quisiera decir que entregar nuestras alegrías, dolores, nuestros relatos y cicatrices es amor... Y cuando se romantiza esto completamente con nuestro deseo carnal no es compatible. Yo no entrego mi corazón, porque mi interior es valentía y fortaleza y todo lo demás es gratificante deseo humano y es ahí en donde nace el cuestionamiento humano.

¿Quiero entregarme a ti? Pero, ¿en qué?
En mi ser, en mi vida o tan solo en esa fugacidad que todx ser existente merece querer y tener.

Yo vivo y disfruto completamente de cada uno de mis sentidos corporales e independiente de que estemos en el siglo XXI las mentes siguen enjauladas, a pesar de esto mi locura como me dicen tantxs es una denotación que me desata de romper todo taboo de  esta semi redonda tierra.