Cap7 "Recuerdos del pasado"

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El sol brillaba suavemente sobre el parque, donde Ymir y Shinji disfrutaban de una tarde tranquila. Las risas de los niños resonaban alrededor de ellos, creando una atmósfera de alegría y despreocupación. Mientras caminaban, una niña pequeña se acercó corriendo a Ymir con una sonrisa radiante.

- ¿Me puedes levantar? - pidió la niña, extendiendo sus brazos hacia Ymir.

Ymir, con una sonrisa gentil, se inclinó y levantó a la niña en sus brazos. Sin embargo, al mirarla a los ojos, algo dentro de Ymir se quebró. En el rostro de la niña, vio a sus hijas de su vida pasada como esclava, y un torrente de recuerdos dolorosos la invadió. Lágrimas comenzaron a llenar sus ojos, y su sonrisa se desvaneció.

Shinji, al notar el cambio en la expresión de Ymir, se acercó preocupado.

- ¿Estás bien, Ymir? - preguntó con suavidad, tocando su hombro.

Ymir, con la voz quebrada, respondió:

- Recordé a mis hijas... Fueron recompensas que me dieron. Ellas me amaron, pero yo no supe amarlas como debía, aunque las quería tanto...

La niña en brazos de Ymir notó la tristeza en su rostro y miró a su alrededor, buscando a su madre. Shinji la tomó con cuidado y la dejó en el suelo, observando cómo corría de regreso a los brazos de su madre.

- Ymir, lo siento mucho - dijo Shinji, apretando suavemente su mano. - Sé lo que es perder a seres queridos. En mi vida pasada, antes de conocerte, fui piloto de un Evangelion. Perdí a muchas personas cercanas a mí, incluyendo a Misato. Ella se sacrificó para detener al Eva Imaginario. A veces parece que el dolor nunca se va.

Ymir lo miró a través de sus lágrimas, sintiendo la sinceridad y el dolor en sus palabras.

- Las vidas pasadas no volverán, Ymir - continuó Shinji, su voz temblando ligeramente.
- Pero tenemos la oportunidad de construir algo nuevo aquí, juntos.

Mientras caminaban de regreso a casa, Ymir seguía con la mirada perdida, sumida en sus pensamientos. Recordaba cómo había amado a alguien que la había esclavizado y utilizado. El miedo de repetir el mismo error, esta vez con Shinji, la atormentaba.

Justo cuando sus pensamientos amenazaban con abrumarla, sintió la mano de Shinji tomando la suya. Al principio, fue un simple toque, pero luego se sintió diferente. Era como si fuera la cuerda de una cometa que se había soltado, guiándola de regreso a la realidad.

Ymir miró a Shinji, viendo en sus ojos una promesa de algo diferente, algo mejor. La calidez de su mano en la suya le dio una sensación de seguridad y esperanza que no había sentido en mucho tiempo.

- Gracias, Shinji

susurró, apretando su mano con más fuerza. En ese momento, supo que, aunque el camino fuera difícil, no estaría sola. Juntos, podrían enfrentar el pasado y construir un futuro lleno de amor y comprensión.

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