04;extrañar.

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Me desperté y me encontré con Guido durmiendo mientras me abrazaba por la cintura. Sabía que lo había hecho inconscientemente, pero no me molestaba en absoluto. Ayer fue mi primer día como diseñadora y ya estaba durmiendo con mi jefe. Intenté separarme sin despertarlo, pero lamentablemente lo desperté. que pelotuda soy.

Guido me miró y habló algo ronco, recién despierto.

-Buenos días.- dijo con una sonrisa y se sentó en la cama. Yo me levanté y sonreí.

Fui directo al baño, hice mis cosas y me puse un poco de pasta de dientes en el dedo para cepillarme. Soy una persona que tiene problemas para dormir en casas ajenas, si duermo en la casa de otra persona, es muy probable que no duerma. Pero anoche no tuve ningún problema, al contrario, dormí muy bien.

Salí del baño y Guido había entrado. Me senté en la mesa y vi que había puesto agua para el mate. Estaba pensando en qué decirle a mi jefe con respecto a renunciar. Siempre fue muy buena onda, pero con la propuesta que me hicieron los chicos de la agencia, es muy tentadora. A veces había días en los que no trabajaba y no entraba la plata. Cuando trabajaba con Iván, él me cobraba el doble por los diseños. Podría decir que cada trabajo con él era como mi sueldo mensual. Trataba de pensar que todo no era por el dinero, sino por la oportunidad y la suerte que se me presentaba. La plata con ellos me daba igual.

Cuando Guido salió del baño, puso el agua en el termo y empezamos a tomar mate.

-Nuestro mánager ya sacó los pasajes para nosotros.-dijo Guido y sonreí.

-Gracias por la oportunidad.-dije.

-No es nada, no tenes por qué agradecer, linda.-respondió Guido mientras me pasaba el mate.-¿Dormiste bien anoche?.-me preguntó.

-Sí, muy cómoda tu cama, por cierto- respondí, y él puso una cara y empezó a sonreír.

Miré la hora y me di cuenta de que en una hora tenía que estar en la agencia.

-Guido, en media hora me voy a tomar un Uber, de hecho, ya debería estar pidiéndolo.- dije, y él me miró.

-Nah, te llevo yo, tengo que ir a ver a mis hermanos igual-respondió.

-qué linda te queda mi ropa.-dijo él, y me di cuenta de que llevaba puesta su ropa, pero no podía ir a la agencia así.

-Ya me la saco, perdón.-dije mientras me levantaba.

-Te regalo mi remera.- agregó el

Fui a cambiarme con la ropa que tenía ayer, agarré mi mochila y guardé la remera. Tenía su olor, un olor a perfumeee.... Guardé la computadora y dejé mis cosas encima del sillón. Con Guido estuvimos cebando mate un rato más hasta que llegó la hora de irnos.

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El viaje en el auto no fue incómodo. eran de esos silencios que no te molestaba. para colmo sonaba "Amor Amarillo" de Cerati en la radio. Mis viejos nunca fueron de escuchar música argenta, siempre preferían bandas y artistas de afuera. Pero con Cerati era distinto, sus letras te llegaban, te hacían sentir que era más que una canción, era un sentimiento, No puedo decir que soy fanática de Cerati, no lo escucho todos los meses, Yo soy más de Taylor Swift, pero igual me pegó la canción.

Después de la canción, en la radio empezaron a decir cosas del clima y eso. Guido rompió el silencio y dijo

-Ojalá que en Uruguay no llueva.-Y yo lo miré.

-para frío o calor llevo?- él me respondió

-un poco de todo, diría yo.-Así que ahí quedó la charla, hablando del clima y de qué llevar para el viaje.

𝐥𝐨𝐯𝐞𝐫𝐬 𝐫𝐨𝐜𝐤. || 𝐠𝐮𝐢𝐝𝐨 𝐚𝐫𝐦𝐢𝐝𝐨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora