𝗠𝗶𝗻𝗲 - 𝗵𝗲𝗲𝗷𝗮𝗸𝗲 ׄ ⪦̮

nightmare ꩟

Se sentía desorientado, perdido, fuera de si, si vista no enfocaba. Parecía que no fue una pesadilla. Su garganta raspaba cada vez que tragaba saliva, evidentemente seca. Sentía algo arder al rededor de sus muñecas, estaba atado, hacía calor en el cuarto.

Sus ojos se llenaron de lágrimas, el era el objetivo de ese hombre y Sunghoon lo trajo hasta el. Seguro Sunghoon no lo sabía ¿Cierto? Sunghoon no lo pudo haber traicionado, él no... Él no era capaz, él era su novio. Sunghoon debió ser engañado, no quería aceptar la realidad.

Sunghoon lo trajo sabiendo todo a esta casa.

–Él no puede... Él es mi novio–empezó a alegar entre gritos desgarradores, entre su amargo llanto, entre su desesperación.

–Shh, es mejor que no grite–entró la muchacha de antes, Yunah parecía alguien confiable–Va a hacer que se enoje y créame, va a ser horrible para usted–acarició su cabello en un intento de calmarlo.

–¡Tú también estás detrás de esto! ¡Trabajas par-...–la pelinegra le tapó la boca y con su mano libre, la puso entre sus labios diciéndole directamente que guardara silencio.

Unos pesados pasos descendieron presurosamente y pasaron por el frente de la gastada puerta de su cuarto. Al parecer era Heeseung, el maldito que le robó su libertad.

–Se que ahora no me tiene confianza, pero quiero ayudarlo a mantenerse a salvo de ese... Monstruo–denotó con desprecio–Entonces, escuche con atención. Hay algunas cosas que debe seguir al pie de la letra para que Heeseung no le haga daño–el castaño miró expectante a la pelinegra–Nunca pero nunca, cuestione lo que hace, no hable si el no se lo pide, no le alce la voz el odia los gritos y haga lo que el le diga. Si haces todo esto, va a estar bien pero, si decides no hacerlo... Le va a ir muy mal–finalizó con una cara seria.

Jaeyoon no podía creerlo, esa sería su vida de ahora en adelante y tenía que apegarse a esas reglas tan extrañas para seguir con vida.

–Volveré más tarde con su cena, duerma si quiere–sonrió amablemente antes de salir del cuarto.

( ❕ )

No quería aceptar la nueva vida que tendría ¿De qué era capaz? Se veía que poseía de dinero por el buen cuidado de la casa, su corazón estaba destrozado, jamás pasó por su mente la idea de que Sunghoon le hiciera esto lo regalara como si fuera ropa, como si fuera un pedazo de carne, como si fuera la nada misma.

¿Y si ese era el objetivo de Sunghoon? ¿Y si le pagaron? ¿Cuánto debía costar Jaeyoon? Su libertad por unos cuantos billetes verdes, vaya, no sabía que valía tan poco ¿Sunghoon se burlaría de todas las muestras de amor con sus amigos? ¿Sunghoon de verdad era así de malo? Una persona así debe tener el corazón tan podrido y lleno de maldad para hacer algo tan malo como lo es burlarte de las personas que te quieren de verdad.

A esas personas no se les debería llamar "seres humanos" porque están podridas.

Sus pensamientos fueron interrumpidos por suaves toques en la gastada puerta que separaba el pasillo exterior de su habitación, emitió un "adelante" en voz baja.

–Espero que le guste–cerró la puerta detrás de ella delicadamente y apoyó la bandeja que mantenía el plato frente al castaño–Tiene que comer por si lo agarra bruscamente, usted pueda darle una patada en su entrepierna–dijo bajando la voz.

Jaeyoon le respondió con una risa, asintió y acto seguido tomó el plato en manos para empezar a digerir la comida, al menos era alimentado y Yunah venia a hacerle algo de compañía.

–Al menos te preocupas por mi bienestar–sonrió ligeramente–¿Cuánto tiempo llevas sirviendole a ese hombre?–cuestionó curioso.

–Desde que escapó de nuestra casa y me llevó con el–se apoyó en las columnas de la cama–En nuestro antigüo hogar, éramos maltratados. Sin embargo, no cambia mucho mi destino porque igualmente sigo haciendo tareas duras pero, no me quejo al menos no me grita y golpea tan seguido–relató con tristeza–Heeseung no es malo, vivimos por años en malas condiciones y malos tratos. Lo que hizo que, de alguna forma, el replique esas actitudes y este un poquito mal de la cabeza–

–En vez de romper la cadena, la siguió, increíble–murmuró–¿A qué te refieres con "tan seguido"? ¿Cuánto tiempo?–interrogó, aunque la conociera desde hace unas horas se preocupaba porque se veía que era una niña apenas.

–Bueno... Suele tratarme mal, no tan severo, cuando las cosas en su trabajo no van muy bien pero del resto, el me trata bien–afirmó con una sonrisa a lo último–Pagó por un profesor privado para que me enseñara modales, a leer, escribir, sumar, restar, dividir y multiplicar. Estoy muy agradecida–

El castaño y la pelinegra pasaron la noche compartiendo anécdotas sobre sus vidas (mayormente era Jaeyoon) y sus gustos para conocerse un poco más, Yunah era la única que estaba ahí para no entrar en la locura.

( ❕ )

–Este idiota, viene a destrozar mi puto bar–escupió con rabia.

Un tipo había iniciado una pelea en su bar y rompió unas costosas mesas de cristal, obviamente, Heeseung no dejó que el tipo saliera del establecimiento y lo llevó a su sótano.

Heat era el bar de Heeseung, era un bar un tanto... Peculiar. Tenía la fachada de ser un bar común y corriente pero, si tú eras uno de los clientes de "alto rango" podías entrar a la zona más repugnante del lugar.

Esa zona estaba llena de artefactos de tortura, bañeras de sangre y por si fuera poco. Los bocadillos eran hechos de restos humanos, un asco. Estaba hecho para los más depravados, la parte podrida de la humanidad. Heeseung rara vez estaba en ese lugar, prefería la zona donde no hubiera nada que manchara su costoso traje.

Pero ese idiota, ese jodido idiota, logró sacarlo de sus casillas y iba a pagar de la peor forma. Su castigo era torturarlo y luego utilizarlo en alguna actividad, le había quitado unos ceros a su cuenta bancaria, maldito.

busquen a Sunghoon y masacrenlo a palos por fa. 🗣️