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pillado en el acto ‼˚.⁺⊹( ren kaji x lectora)
✿ resumen: esta es la primera vez que Kaji se queda sin piruletas. También es la primera vez que Kaji sale corriendo de una habitación tan rápido después de que lo atraparan besándose contigo. Por Umemiya y Hiragi, nada menos. Entonces, ¿cómo se metieron en este aprieto ? ✿ contiene: tonterías pero muy sugerentes, ser atrapado besándose con Kaji, besándose con Kaji (risas), un poco de crack si imaginas la reacción de Kaji
✿ n/a: ¿recuerdas cómo reaccionó Kaji y se puso (o_o) cuando Ume y Hiragi lo atraparon hablando con Sakura en la azotea? Bueno, esto es todo, ¡pero hazlo picante! jajaja ;-; Dilo conmigo ahora: ¡pobre Kaji! jajaja por favor acepta mis disculpas, piruleta~
✿ wc: 1k
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¿Cómo pudo Kaji ser tan descuidado?
Todo empezó cuando acompañaste a tu novio, Ren Kaji , a la azotea de Furin High para agarrar una curita del botiquín de primeros auxilios. Él se hizo un pequeño corte en el dedo al intentar abrir su sexta piruleta del día. Sostuviste su dedo en tus manos, mientras lo envolvías cuidadosamente con una venda adhesiva.
Kaji murmuró un "gracias" y extendió su mano abierta hacia ti, indicando que te estaba pidiendo otra paleta. Estabas empezando a pensar que estaba desarrollando una adicción a ese maldito pedazo de caramelo duro y redondo. Comenzó a depender de ti para que se los llevaras también, ya que ustedes dos siempre estaban juntos de todos modos. También porque tenías una bolsa y a veces los perdía cuando se caían de los bolsillos de su sudadera con capucha.
"Esto no puede ser." Suspiraste con frustración, después de revisar todos los bolsillos de tu bolso y descubrir que ya no había piruletas.
Él te lanzó una mirada perpleja. "¿Qué?" Kaji echó un vistazo por encima de tu bolso a través de tu hombro y se dio cuenta de lo que querías decir. Le dijiste a Kaji una mirada de disculpa a cambio. "Se me acabó". Kaji sacudió la cabeza con incredulidad. "¿Cómo es eso posible?"
resopló y cruzó los brazos. "¡Es porque los consumes demasiado rápido! Ya te comiste seis hoy, incluso te cortaste el dedo al abrir el envoltorio".
—Entonces, ¿ahora es mi culpa? —Kaji hizo una pausa por un momento, y sus ojos entrecerrados se posaron en tus labios carnosos, lo que le dio algún tipo de idea. Kaji se inclinó más cerca de ti, un suave rubor se abrió camino hacia tu rostro con la proximidad de la boca de Kaji directamente frente a la tuya.
—Supongo que esto tendrá que bastar por ahora —suspiró mientras inclinaba tu barbilla y se acercaba para darte un beso.
—Ren, podríamos comprar uno... —murmuraste entre besos. —No, necesito algo dulce en mi boca ahora mismo —argumentó obstinadamente.
Él mordió y chupó tu labio inferior como si fueras su piruleta, y agarró tu mandíbula para mantener tu cabeza en su lugar mientras continuaba devorando tu boca, explorando tu caverna mientras te derretías en él, besándolo de vuelta con fervor y pasión, el leve sabor a azúcar de su piruleta anterior aún persistía en sus labios.
Los besos que compartiste con Kaji iban desde suaves y gentiles, hasta escalar gradualmente hasta ser increíblemente necesitados y apasionados, dejándote sin aliento y con la cabeza llena solo de él, como estás ahora, completamente en el momento.
—Ren... —jadeaste, sintiendo sus manos recorriendo tus muslos, sus dedos ligeramente debajo del dobladillo de tu falda, y al mismo tiempo su cuerpo estaba presionado muy cerca contra el tuyo. Dejaste escapar un pequeño gemido. —No podemos...
—Solo un poco más, necesito mi dosis de azúcar... —No podía detenerse y tú no tenías el suficiente autocontrol para alejarlo de ti, ya que los besos y caricias de Kaji se sentían demasiado bien, ¿y cómo podría resistirse a lo dulce que te veías y sabías? Era como si fuera adicto a ti, el anhelo que sentía por ti era incluso más fuerte que su ansia por sus piruletas.
Ustedes dos se alejaron un poco para tomar aire, pero lo que Kaji vio frente a él le dejó sin aire de los pulmones.
De pie a cierta distancia estaba Umemiya, con la mano cubriendo su boca después de haber dejado escapar un pequeño jadeo. A su lado estaba Hiragi, cuya mandíbula cayó al suelo mientras hurgaba frenéticamente en sus bolsillos buscando sus medicamentos para el estómago.
Por muy mal que sonara, ustedes dos estaban tan concentrados y enredados en el placer que ni siquiera se les ocurrió que alguien pudiera entrar, sin importar si esto era después de la escuela y casi todos se habían ido a casa o a patrullar. Tú y Kaji se empujaron como si estuvieran en llamas. Bueno, sus mejillas, de todos modos, ardían tan intensamente por el enorme rubor que se formó en ellas.
—Ah, amor joven —dijo Umemiya efusivamente. Kaji estaba tan frenético que sus ojos se abrieron como platos.
—Iba a preguntar si podías hacerte cargo de la patrulla mañana, Kaji, pero parece que ya te estás haciendo cargo de otra cosa... —Hiragi se aclaró la garganta y trató de contener su diversión ante la expresión de sorpresa presente en el rostro de Kaji. Al parecer, ambos disfrutaban burlándose de Kaji. Definitivamente tú también estabas en shock, ya que inclinaste la cabeza varias veces en señal de disculpa tanto a Umemiya como a Hiragi.
Ambos les dijeron que estaba absolutamente bien, y Hiragi también se disculpó por sorprenderlos a ambos, golpeando a Umemiya en la cabeza con su puño por reírse de lo "adulto" que era Kaji ahora.
Kaji, que no tenía idea de qué decir o cómo reaccionar o cómo mirar a alguien a los ojos nunca más, rápidamente se puso sus auriculares, agarró tu mano por la muñeca y salió corriendo contigo, rumbo a la tienda de conveniencia para abastecerse de piruletas. Lección aprendida: nunca más te quedes sin ellas. (aunque la verdadera lección aprendida debería ser: no dejes que te atrapen besándote en público nunca más).
ꕤ bono ꕤ
Los dos decidieron dirigirse a la casa de Kaji, un aire de tensión aún se cernía sobre ambos por la vergüenza de haber sido atrapados por Umemiya y Hiragi. Mientras estaba sentado en su cama, Kaji te miró como si quisiera decir algo, pero se detuvo.
Intentaste aligerar el ambiente con tu humor. "Por cierto, me aseguré de cerrar la puerta con llave. No creo que Umemiya y Hiragi entren a tu habitación al azar, Ren". Colocaste tu mano sobre la de él para tranquilizarlo. Kaji finalmente levantó la mirada y sus ojos se encontraron con los tuyos. En el fondo, se sentía avergonzado no solo porque los atraparon a los dos, sino porque la imagen de ti en ese estado y tu expresión facial de felicidad se suponía que era solo para los ojos de Kaji.
—¿Te gustaría continuar desde donde lo dejamos? —preguntó mientras reías y lo abrazabas con fuerza. —Hmm, ¿dónde estábamos? —Agarraste a Kaji por el cuello de su sudadera y lo acercaste para darle otra ronda de besos.
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