Escape

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Los castaños se miraron, hasta que saga habló.

-Podría ser una buena idea amor mío, así tu hermano estará más tranquilo y el mío no tendrá motivos para irse de fiesta y emborracharse porque tendrá una responsabilidad.

-Está bien, pero ¿estás seguro Kanon, quieres hacerlo?

-Claro de no ser así porque lo propondría, no tendría sentido.

-Yo acepto irme con él, pero no quiero que nadie sepa que nos fuimos porque no quiero que Shura me busque.

-No te preocupes Aioria, será nuestro secreto, será mejor que empaques tus cosas, Aioros y yo hablaremos con Athena y Shion para que su viaje sea mañana mismo al amanecer.

-Bueno hemos solucionado un problema ahora el tuyo.... Milo tú ¿qué piensas hacer?

-No lo sé tampoco quiero estar cerca de Camus, hasta que no se me baje el dolor y tristeza que me hizo sentir, así que si pueden averiguar sobre alguna misión a la que puedan enviarme se los agradeceré.

-Veremos qué se puede hacer, vamos te acompañamos a escorpio y de ahí iremos con el patriarca.

Se despidieron del dragón y el leoncito y siguieron su camino.

Kanon tomó las manos del michi entre las suyas, las besó con devoción y miró directo a los ojos al dueño de estas.

-Aioria prometo cuidarte todo el tiempo que estés conmigo a ti y a ese bebé, no les faltará nada y espero contribuir a sanar tus heridas y volver a verte sonreír.

Le dio un pequeño beso en la frente lo que hizo que el minino se estremeciera y sonrojara.

Kanon solo le dio una linda y tierna sonrisa y lo ayudo a empacar.

Mientras tanto Milo ya se encontraba encerrado en su habitación meditando lo sucedido.

"podré perdonarte, sé que lo haré porque te amo, pero hasta qué punto ese amor es correcto sin perder mi dignidad"

Será mejor que intente dormir, se desvistió se puso la pijama y se acosto a descansar.

En el décimo templo, el guardián se encontraba intentado bajar la hinchazón que el trueno atómico y la explosión de galaxias le habían dejado, aún así aunque toda la orden dorada lo atacara no regresaría con el león, su decisión estaba tomada y según él ya no lo amaba, sino que estaba enamorado del mago del agua o eso era lo que él creía, pero se daría cuenta después de lo equivocado que estaba.

Athena y Shion estaban incrédulos ante la situación, aún así aceptaron la propuesta de que Aioria se fuera un tiempo.

Athena habló con Poseidón y este de inmediato aceptó el plan, por eso es que a la mañana siguiente a primera hora del día se dispusieron a partir.

-Por favor dragón del mar, cuida mucho a mi hermanito y cualquier cosa que necesiten házmelo saber.

-Kanon por amor a Athena, cuida bien a mi cuñado y no hagas ninguna otra estupidez.

-Tranquilo bipolar lo cuidaré como a mi vida, nos veremos en unos meses cuando el pequeño nazca.

-Kanon, Aioria les deseo lo mejor, por favor cuídense saben que aquí estamos para lo que necesiten los quiero mucho a ambos-dijo milo  mientras se fundía con ellos en un caluroso y fraternal abrazo- al separarse cada uno tomó su rumbo.

Mientras subían Saga y Aioros pudieron ver que Milo estaba bastante decaído.

-Milo ¿estás bien? Dijo con preocupación el centauro.

-Si chicos gracias por preguntar...intento entender porque Camus hizo lo que hizo, creí que teníamos algo especial, pero el solo se estaba divirtiendo.

-Tal vez si averiguamos qué pasó exactamente esa noche podríamos descifrarlo-hablo el geminiano.

-¿Y ustedes creen que alguno de esos dos va a decirnos qué paso? -dijo Milo con fastidio.

-Pues no perdemos nada con intentarlo, iré a hablar con Camus tendrá que escucharme le guste o no-dijo Saga decidido.

Dejaron al escorpión en su templo y ellos se dirigieron hacia acuario.

-Te dejaré solo cariño, iré a ver al patriarca para saber si hay alguna misión para Milo para que se despeje un poco.

-Está bien-se despidieron con un beso y el centauro siguió su camino.

-Camus ¿en donde estas?

-Hola Saga ¿gustas una taza de café?

Saga pudo notar que el galo tampoco estaba muy bien que digamos, estaba despeinado con grandes ojeras y bastante desalineado en su forma de vestir.

Parece qué pasó un maremoto encima tuyo-dijo con burla.

-No estoy de humor para tus bromas querido, así que si solo vienes a juzgarme y burlarte puedes irte-decía con un ceño fruncido y una mirada asesina.

En realidad... quiero saber ¿qué pasó? dudo que tú hayas accedido a estar con él, sabiendo que amas a Milo.

-La verdad es que ni yo sé cómo sucedió, recuerdo que estábamos platicando, Milo insistió en que los acompañará al bar para pasar un buen rato juntos, pero Shura quería hablar de algo importante, se veía algo preocupado y ansioso así que decidí quedarme con él, Milo acepto sin problema él quedarme con mi amigo, pues él sabía que Shura estaba con Aioria y creyó que hablaríamos sobre ese molesto gato, así que no se molesto por quedarme con él.

-Y ¿que fue lo que te dijo Shura, que es lo que pasó entonces?

-Dijo que estaba confundido respecto a su sentir con Aioria, lo cual me pareció raro, dijo que había otra persona que también le hacía sentir grandes cosas y quería comprobar que era lo que en realidad sentía, mientras el hablaba yo fui a mi cava por un vino que me regaló Surt, quería probarlo y sé que Shura es muy bueno catando, así que quise saber su opinión serví las copas, lo bebimos, el sabor era un poco diferente a los vinos que había probado antes, sinceramente no me gustó y tampoco a él, así que lo dejamos a un lado, pero de pronto comencé a sentir un calor insoportable, Shura no estaba mejor que yo, de pronto ya lo tenía encima besándome, yo no sé porque me deje llevar, sinceramente no sé hasta donde hubiéramos llegado, de no ser porque Shura me dijo al oído que yo era quien le causaba esa confusión respecto a Aioria y que tomando en cuenta que yo no me decidía por formalizar con Milo podríamos intentarlo, pero al escuchar el nombre de ese bicho reaccione y eso hizo que lo quitara de encima de mi, le dije que estaba equivocado que yo no sentía nada más que amistad por él y mi corazón era de Milo, el intento volver a besarme pero no lo permití, le pedí que se fuera, el no quería irse, así que tuve que congelarle las piernas y arrastrarlo hacia afuera de mi templo.

Después de eso me sentí sucio como cuando estábamos en Asgard y estaba junto a Surt y los demás, sabía que debía contarle a Milo para que no se mal interpretara, pero todo salió mal-golpeo la mesa con fuerza- casi no nos vimos para decirle y Shura se me adelantó, ahora no sé si el bichito vaya creerme y perdonarme.

-Saga medito un momento sobre todo lo escuchado.

-Aún tienes del vino que bebieron ese día -se escuchó una voz conocida.

Este es el capítulo 3, se que quieren matar a Shura pero guarden su energía para el otro involucrado que aparece aquí

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Este es el capítulo 3, se que quieren matar a Shura pero guarden su energía para el otro involucrado que aparece aquí.

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