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—Ahora puedes ir con él donde sea. Pero pensando en mí. — susurró sobre mi boca para luego besarla cortamente tomando mi barbilla entre sus dedos.

—¿QUIÉN TE CREES QUE ERES? — lo empujé separándolo de mí.

Sonrió de lado con esa sonrisa que a veces tenía de autosuficiencia.
—El amor de tu vida — dijo doblándose para quedar a mi altura con sus manos entrelazadas en su espalda.

Golpeé su pecho con mis puños, lo empujé fuerte otra vez y éste se balanceó un paso hacia atrás por la fuerza que hice con ira sobre él.

—¡No sabes lo que quieres Taehyung! Me dijiste que fueramos amigos y ahora vienes ¿Y me buscas? ¡Estas loco! — grité en un susurro para que no me escucharan adentro, ni nadie. Mis ojos estaban llenos de lágrimas y Taehyung ahora estaba serio.

Tragó firme. Lo noté en su garganta y miró hacia el lado.
—¡Fui un imbécil! No se si podrás personarme, pero lo intentaré, te amo. Y quiero que estemos juntos para siempre, que peliemos así toda la vida y después callarte con un beso. Que elijas los nombres de nuestros hijos y que nadie nos diga nada cuando demos paseos de la mano como unos tontos enamorados. Quiero estar donde tú estás Sol-ah, déjame hacerte feliz. Por favor. — secó una lágrima que caía por su ojo izquierdo.

—¡Mejor vete por hoy Taehyung! — susurré cruzando mis brazos sobre mi pecho, en una forma de darme consuelo a mi misma.
—¡Estoy trabajando! — solté más calmada.

—Gracias por llevarme a tu casa sin dejarme en la calle. — dijo — Sé que aún me amas. Y que te he hecho daño. Pero lo estoy pagando, créeme. Y haré los meritos necesarios para que vuelvas a mí.

—¡Debo entrar! — me giré.

—¡Espera! — me detuvo de la muñeca.
Tomó mi cara entre sus mano grandes, y con sus pulgares secó mis lágrimas. — No quiero que vean tus ojitos, siento mucho hacerte llorar — besó mi frente — No te besaré más en la boca. Al no ser que tu me lo pidas. No te haré esto más difícil. Tranquila.

Cancelé mi "cita con Jungkook" o lo que sea y me fui a casa. Había un día súper bonito, con un sol lo más parecido a la primavera.

—¡Estoy en casa! —dije entrando casi sin ánimos.

—¿Con esa carita andas por la vida amor mío? — dijo alguien desde el sofá.

—Con esa cara yo audicionaría — dijo otro.

—¿Hobi? ¿Jin? — sonreí.

—¡VEN PEQUEÑA SALTAMONTES! — Jin me estiró sus brazos y corrí hacia él.
—¿Cómo has estado? — me giró para luego bajarme — Extrañamos a los Park y vinimos a verlos.

—¿Qué hacen aquí? — se me llenaron los ojos de lágrimas, sobre todo cuando fui y abracé a Hobi.

—Nos quedaremos aquí. Dos semanas — Estamos de vacaciones — dijo Hobi.

—Si no es más — rió Jin —¡Todo puede pasaaaar! — dijo cantando.

—Tu papás no están, pero Jimin nos dio la clave para ingresar. — soltó Hobi para sentarse en el sillón. — ¡Y aquí estamos! — dijo en un quejido de comodidad.

—Y ¿Como estás? — soltó Jin.

—Bien supongo — me quité la chaqueta — ¿Les ofrezco algo?

—Pidamos algo, muero de hambre — expresó Jin con una mueca graciosa.

—Okey. —miré mi celular, era Jimin — "Ya voy para la casa" me dice Jimin — les leí — dice que traerá comida.

—¡Excelente! — dijo Hobi sacandose su llaves y pertenencias para dejarlas en la mesa de centro.

Comenzamos a hablar, obviamente les conté todo, evitando el tema de Tae.

Estuvimos conversando y poniéndonos al día entre risas y anécdotas.
Y La verdad que con ellos siempre mi tiempo pasaba rápido. Eran ya tipo las 6 PM y Jimin no llegaba. Hasta que el timbre sonó.

—¿Será la comida? Quizás Jimin la envió para acá — dije poniéndome en pie para abrir.

—O viene muy cargado — dijo Jin riendo.

Hobi estaba serio mirando la puerta jugando con sus llaves en sus dedos de modo giratorio.

Abrí.

— ¿Tae? — solté al verlo parado en la entrada de mi casa. Me giré rápidamente a ver a los demás. A Hobi se le había caído las llaves al piso.

—¡Estoy decido, vengo a hablar con Jimin! — soltó Tae quién venía levemente sudado.

—¿QUE PRETENDES VINIENDO A MI CASA? —dijo Jimin atrás de Tae en el patio de la casa.

Al escuchar aquello Jin y Hobi se pusieron de pie casi corriendo para ir a la puerta donde al fin y sin premeditación se encontraban una vez más los 4.

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¡AAAAAAAAHHHHHH!
ESTAMOS LLEGANDO A LA RECTA FINAL CASI... DIGO CASI.
Y LEO CADA UNA DE SUS REACCIONES.
ME EMOCIONA EN LO QUE VA DE HISTORIA.
AMANDO.

¿DE QUE LADO DEL MUNDO LEEN ESTA HISTORIA?
NOS LEEMOS PRONTO, BESOS 💕🫰🏻🔆



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