EL AMIGO DE MI HERMANO

47.

1 año 6 meses sin él.
¿Cómo se supone que sobreviviría a tanto tiempo sin él?

Llevaba una semana, me mandaba selfies diarias y me resumía su día en textos. Me decía que me amaba.

Una vez llegó un audio y me cantó la canción de
New West - Those eyes. Y se volvió mi himno para hacerme más fuerte.

(...)

El tiempo pasó y ya llevaba un año adentro. Lo extrañaba, hablábamos casi todos los días, ya no todos los días como antes, pues se entendía que a veces salían de excursión, y se quedaba sin señal alguna. Hasta que volvía y me contaba que tal su día  o experiencia.
En sus días libres ibamos a citas, cines, películas,  comidas que nunca habíamos probado, etc... Aprovechamos lo más posible nuestro tiempo limitado.

De vez en cuándo iba con la mamá de Taehyung, y la acompañaba a sus compras, ella era sola y me daba el tiempo de ser su familia en algunas cosas. Me trataba bien y decía que yo era como la hija que nunca tuvo.

Yo por mi parte había decidido estudiar lenguaje y traducción de idiomas, me parecía fascinante saber más de un idioma. Eso me permitía algunas pasantías también y mantener mi mente ocupada sin Tae.
El primer semestre sería el idioma Chino. Y había ido 2 semanas a China, al país. Tenía 2 amigas de curso que estudiaban conmigo. Las conocí en el curso, en la universidad, y tenían mi edad.

Este semestre estábamos full inglés avanzado, y ya era mi tercer idioma. Obviamente el Coreano era mi primer idioma.
La pasantía sería en 2 días. Y nos iríamos en 2 semanas a EE.UU.

Jungkook había preferido tomar leve distancia, decía quebya regresaría a mi y a nuestra amistad una vez él sanara bien. Y se entendía, aunque a veces solía extrañarlo, no lo contacté.

(...)

Me dediqué a pasear por la playa, eran las 10 AM. Y amaba el sonido del mar y de las gaviotas, me despejaba la mente y el viento elevando mi flequillo se sentía realmente hermoso. Si bien mi viaje era mañana, odiaba el sentimiento de dejar Corea, porque sentía que me alejaba de mi niño. Podía ser mayor que yo, pero para mí, era mi niño. Kim Taehyung.

—¡Kim Taehyung! — susurré con mis brazos cruzados abrigándome con mi cárdigan color Beige. —¡Kim Taehyung! — miré el mar.
—¡KIM TA...

—¿QUEEEE? — gritó alguien por mi espalda con ternura respondiendo a mi llamado.

Me giré y me topé con esa sonrisa.
—¡Taehyung! — dije al final. Y me lancé a abrazarlo y colgarme de su cuello.

—¡Amoooor! — dijo levantándome del suelo — Yo también te extrañé. — me bajó para darme muchos besitos en todo mi rostro.

—¿Cuándo saliste? ¿Por qué no me dijiste?

—Aaah bueno, era una sorpresa. — tomó mi mano para entrelazarla con la mía.

—Te amo Tae, no sabes cuánto me haces falta.

—Lo sé... Te amo también vida, pero ya nos quedan 6 meses. Debes ser fuerte.

Hice un puchero.

—¡No hagas esos gestos! Sabes que me dan ganas de muchas cosas cuando haces eso...

—¿Cómo qué? — dije sonriendo.

—Amo cuando me coqueteas — sonrió mordiendo sus labios — Me dan ganas de besarte locamente. — susurró en mis labios.

—Y ¿Por qué no lo haces? — dije inclinándome hacia él.

—¿Taehyung? — dijo alguien detrás de nosotros. Una voz femenina para ser exactos.