Corazón de robot // freenbecky

Capítulo 43.

𝐀𝐦𝐨𝐫 𝐜𝐢𝐞𝐠𝐨. 𝐄𝐥 𝐞𝐧𝐚𝐦𝐨𝐫𝐚𝐦𝐢𝐞𝐧𝐭𝐨 𝐚𝐛𝐫𝐮𝐦𝐚 𝐥𝐚𝐬 𝐩𝐚𝐫𝐭𝐞𝐬 𝐝𝐞𝐥 𝐜𝐞𝐛𝐫𝐞𝐛𝐨 𝐡𝐮𝐦𝐚𝐧𝐨 𝐪𝐮𝐞 𝐬𝐨𝐧 𝐫𝐞𝐬𝐩𝐨𝐧𝐬𝐚𝐛𝐥𝐞𝐬 𝐝𝐞 𝐩𝐞𝐫𝐜𝐢𝐛𝐢𝐫 𝐞𝐧 𝐞𝐥 𝐨𝐭𝐫𝐥 𝐮𝐧𝐚 𝐩𝐞𝐫𝐬𝐨𝐧𝐚𝐥𝐢𝐝𝐚𝐝 𝐜𝐨𝐧𝐟𝐥𝐢𝐜𝐭𝐢𝐯𝐚, 𝐭𝐨́𝐱𝐢𝐜𝐚, 𝐞𝐭𝐜.

                                  𝐁𝐄𝐂𝐊𝐘
—¡Me aceptaron! —salte sobre Freen, abrazándola como un Koala—. Dios, estoy tan feliz.

Freen sonrió, —Mino me llamó para decirme que el contrato estaba listo, no puedo creer que vayas a firmar con un disquera. Estoy tan orgullosa de ti.

—No sabes cuanto te agradezco, si no hubiese sido por ti quizá no esté aquí —me bajé de ella.

—No, Becky, todo esto es por ti. Es tu destino, es tu voz, estás aquí porqué eres maravillosa, porque ellos saben lo que vales y yo también. Te acompañaré en cada paso que des —dejó un beso en mis labios—. ¿Estás lista para firmar?

—No puedo sentirme más preparada. Después que firme tengo que ir a ver a mi padre, dice que tiene algo muy importante que decirme y mañana operan a mi madre, Freen.

Esta apartó mi cabello, —Podrás con todo y yo estaré ahí, dándote fuerzas. Te amo, Becky.

—Yo también te amo.

Era como vivir en un sueño, todo estaba saliendo muy bien, mi vida parecía irreal. No quería que aquello se apagara.

<<Cinco días después>>.

Entré a la oficina de Freen, estaba agotada, había tenido un muy largo día. Después de pasar por la disquera y hablar con Mino, me dispuse a ir a visitar a mi madre, estaba recien operada, y el doctor me dijo que su recuperación iba mejor, y que no pensaba que podía verse tan fuerte después de ello.

Sobre mi padre, estuvimos hablando de su empresa y de los problemas que ha tenido con los Sarocha. Marco ha estado dando guerra, pero mi padre regresó todo el dinero, y aunque Freen no es su persona favorita de todo el mundo, lo ha estado intentando.

—Hey, Freen —caminé hasta ella y besé sus labios—. ¿Todo bien? Te noto algo estresada.

Y era cierto, casi no dormía y cuando nos quedábamos en su departamento o en mi casa, esta no paraba de dar vueltas y vueltas en la cama. Sus ojeras habían crecido, pero no era la unica que estaba extraña, Fay y Nam tenían muchas peleas constantemente, no entendía la razón.

Parecían estarme ocultando algo. No quería sonar paranoica pero era lo que parecía; se notaba cansada y comía muy poco. Freen no estaba bien, por más que sonriera.

—No es nada, es solo trabajo, quiero salirme de esta empresa, Becky. Ya no soporto a mi padre —se frotó el entrecejo.

—Oye —busqué su mirada—. Deja todo esto, no te mates trabajando para alguien que no lo valora.

Besó mi mano, —Lo sé, lo haré. ¿Cómo te fue hoy con Mino?

—Oh, eso, me fue bien. Aunque compartí más con Jin, este me daba técnicas muy buenas. ¿Puedes creer que juntos estamos escribiendo una canción?

Ladeó la cabeza, —¿Jin? ¿Ese que siempre te sigue a todas partes? —su ceño me confirmo que no le agradaba para nada el chico.

—Freen... no empieces, nada que ver con él. Es un buen chico y socio de la disquera, no puedo decirle que no me ayude cuando estoy recien escribiendo las canciones para ser lanzadas —me crucé de brazos.