ᡃ§ɧαʈʈeɽeᶑᡃ ≠ •°ᵈⁱᵃᵐ°•

⊱|19|⊰

|Junio | 2008|

•

La noche era fría, pero la leve brisa que corría por el parque no lograba enfriar el calor que Liam y Damon sentían después de la fiesta.

Ambos caminaban sin rumbo fijo, riendo como dos adolescentes que acaban de descubrir el mundo. Las luces de la ciudad titilaban a lo lejos, y el sonido de sus pasos era amortiguado por la hierba húmeda bajo sus pies.

"¡No puedo creer que vomitaste justo detrás de la mesa de aperitivos!" dijo Damon, intentando contener una carcajada, mientras extendía una botella de vino hacia Liam. "Toma, lávate la boca con esto. No quiero oler a vomitado cuando te acerques"

Liam tomó la botella, agradecido, y la llevó a sus labios, haciendo un exagerado buche como si estuviera cepillándose los dientes.

Luego, escupió el vino en un arbusto cercano, mostrando una sonrisa burlona con los dientes teñidos de rosa.

"¿Mejor?" preguntó, abriendo mucho los ojos en un gesto de falsa inocencia.

Damon soltó una carcajada y asintió. No podía evitar sentirse encantado por la ligereza y el desenfado de Liam.

Había algo en esa noche, en esa mezcla de vino barato, risas y la brisa fresca que les hacía sentir como si estuvieran en su propio mundo, separados de la realidad.

Continuaron caminando, y en un arrebato impulsivo, Liam se acercó a un bote de basura y lo pateó con fuerza, haciéndolo rodar por el césped.

Ambos se rieron del estruendo metálico y sacaron sus teléfonos con tapa.

Sin decir palabra, se llamaron y comenzaron a hablarse a través de los dispositivos, susurrando tonterías, mientras se miraban a los ojos.

La absurda situación los hizo reír aún más, sus voces mezclándose con el eco de la llamada.

De repente, Damon abrazó a Liam por la cintura, atrayéndolo hacia él con una firmeza que denotaba la mezcla de emociones que lo embargaba. El contacto entre ambos era tan natural, tan fluido, como si sus cuerpos estuvieran destinados a encontrarse de esa manera.

"¿Sabes?" comenzó Damon, su voz un poco más seria. "Desde que probé esa droga contigo, siento que algo cambió. Me siento... más vivo"

Liam, todavía riendo por la broma del teléfono, se dejó caer en el césped, arrastrando a Damon con él.

Ambos se tumbaron sobre la hierba, mirando el cielo estrellado, la risa finalmente muriendo en sus labios mientras la calma de la noche los envolvía.

Damon giró la cabeza para mirar a Liam, sus ojos buscando algo más allá de las palabras.

"¿Alguna vez te has enamorado realmente, Liam?" preguntó Damon, su voz baja, casi un susurro. "¿Qué piensas cuando escuchas la palabra 'amor'?"

Liam frunció el ceño, reflexionando por un momento antes de responder.

Su mente, todavía nublada por los efectos de la fiesta y las drogas, luchaba por encontrar una respuesta clara.

"No lo sé... Creo que no del todo..." admitió finalmente, su tono sincero. "No creo que me haya enamorado nunca realmente... Para mí, el amor siempre ha sido algo... físico, algo que se asocia con el sexo. No puedo evitarlo, es lo único que parece tener sentido. Mi cabeza está completamente jodida por toda la basura que he visto y escuchado..."