ɢɪʀʟs ɪɴ ʟᴏᴠᴇ - ʀɪᴠᴇʀs_ɢɢ

24. ᴀᴍᴏʀ ᴀᴍᴏʀ ᴀᴍᴏʀ

Narra Luna

— Lu, no lo hagas tan duro.— Sam me regañó.— ¿Por qué metes toda la mano? Con dos dedos basta.

— Pero, es que no se lava bien.— Señale el vaso en mi mano.

Odiaba dejar algo sucio.

— No es necesario que sea tan duro.— Habló, y me dio risa porque se escuchó bien fácil de alburear, también lo anterior.— ¿De qué te ríes?

— ¿Con dos dedos te basta Samy?— Le pregunté y vi que me entendió, ya que se sonrojó rápido.

— Síguele lavando mejor.— Me dio un leve golpe en el hombro.

Sonreí y seguí lavando, luego de unos minutos fui a donde estaba ella y la vi de espaldas, la abracé y puse mi cara en su hombro.

Poco después solté un suspiro, últimamente me sentía cansada.

— ¿Estas bien?— Preguntó.

— Si.— Respondí sonriendo.— Solo un poco cansada.

Se dio la vuelta y frunció su ceño, sabía lo que pensaba.

— No Samy, no estoy enferma, no creo que sea eso.— Respondí.— Solo he estado trabajando mucho, no he dormido bien nada más.

— Si te sientes mal me lo dices.— No me lo pidió, me lo exigió.

— Si, te lo diré.— Respondí sonriendo.— Pero ahora estoy bien, solo quiero dormir contigo.

Sonrió y puso su cabeza en mi pecho, yo puse mi barbilla en su cabeza.

Me gustaba tenerla cerca, arreglaba o curaba cualquier dolor que sentía.

— Vente, vamos a dormir un rato, quiero que descanses y estés bien.— Jalo mi mano para subir las escaleras.

Obedecí yendo detrás de ella, entramos al cuarto y cerró la puerta, me recosté en la cama lentamente boca abajo, poco después se recostó a mi lado y me abrazó.

— Perdón si te abrazo mucho, no sé cómo hacerte sentir bien.— Susurró.

— No importa, me gusta que me abrace, me hace sentir bien, solo con su presencia.— Susurre dándome la vuelta para quedar de frente.

Sonrió y se acercó más a mi, haciendo que yo quede más abajo que ella, así que puse mi cabeza en su pecho y me intenté dormir.

[...]

Sentí la mano de Samy en mi garganta, esto hizo que me despertara toda aturdida, ni sabía cuánto tiempo había dormido.

— Perdón, no quería despertarte, pero tienes fiebre.— Habló, lentamente para que le entendiera, tenía entrecerrados mis ojos.

Y aún no sabía ni qué hacer.

Sentía mi garganta seca, me dolía y la cabeza también.

— Ire por un paño húmedo.— Dejó un beso en mi frente y salió del cuarto.

Me senté en la cama un poco confundida, luego pestañee unas cuantas veces para poder enfocar un poco más mi vista.

— ¿Que horas son?— Me pregunté, toda confundida.

Miré al reloj en la mesita de noche y eran las 12:26, ya era media noche, más de esta.

Poco después Sam entró, con el paño húmedo.

— ¿Samy qué haces despierta?— Pregunté confundida.

— Te sentía rara mientras dormías, vi que temblabas y me preocupé.— Respondió y hizo un gesto para que me volviera a recostar en la cama.

Puso el paño en mi frente, cerré mis ojos con fuerza ante la sensación.

— Perdón, pero lo tengo que hacer mi amor.— Habló tan rápido y preocupada, que ni cuenta se dio como me había llamado.

Sonreí y asentí, no le diría nada, de que no se había dado cuenta, porque cuando ella me dice algo cursi se sonroja de lo que ella misma me dijo.

— ¿Te duele algo?— Preguntó luego de unos segundos.

— La cabeza y la garganta.— Respondí.

— Te iré a traer pastillas.— Salió nuevamente del cuarto, no me gustaba que ella estuviera despierta a esta hora, más por mi culpa.

Me enojaba enfermarme, no se porque me enferme.

— Ya las encontré.— Habló entrando, se acercó a mí y me dio una.

Eran dos ay no, más peor mi noche no podría ser.

— Ándale Lu, tienes que tomártela, te hará bien.— Me pidió, su tono de voz era muy preocupado.

— Si me las tomo, dormirás?— Pregunté.

Se quedó callada unos segundos, y cuando yo iba a dejar las pastillas en la mesita de noche.

— Espera, si, si dormiré si te tomas las pastillas.— Habló.

Entrecerré mis ojos y me tome una, con mucha dificultad.

Por poco y la regresó. Poco después la segunda, odiaba las pastillas.

— Bien mi amor, ¿lo ves? No es tan difícil.— Habló, pero luego se quedó callada analizando lo que había dicho.— Mi amor...— Susurró dándose cuenta

Sonreí y asentí.

— Perdón, no te quería decir así, bueno si, pero no quería incomodarte.— Se disculpó rápidamente.— Además no sabía si te enojarías porque te llamara así o que.

— Está bien Samy, no me incomoda.— Agarre su mano.— Vente, durmamos, estoy bien.

Sonrió y se recostó a mi lado, tratando de no lastimarte, nos quedamos así y poco después me dormí.

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Empezamos fuerte el cap

Ola jajaja, no me quise ir, me quieren internar, valiendo verga como siempre.

¿Está bien que Samy ya le haya dicho amor a Luna o aún no?

No tengo nada bueno que hacer aparte de morirme, así que cap nuevo ^ ^

Me sentí triste al ver que me cambiaron a jorgito 😔

Esa no te la perdono Rivers

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