MOTIVE

XLI

Jimin hizo un pequeño puchero al ver a su esposo trabajando debajo del sol, se veía tan cansado y acalorado su pobre alfa. Pero debía admitir que se veía muy sexy de esa manera, le encantaba como las gotas de sudor bajaban por su frente.

El omega se acercó y Yoongi sonrio al verlo, dejo tirado el azadón y se acercó a su esposo. Jimin había sido su salvación en ese momento, ya estaba muy cansado de trabajar, lo único que quería es regresar a su casa, tomar un baño y relajarse el resto del día.

— Me siento muy orgulloso de ti. Aprendiste muy rápido a sembrar, eso es increíble — el omega deposito un beso en los labios de su amado — estoy seguro que para el final del día habrás sembrado muchísimo más

Yoongi sonrio nervioso, y ahora como le diría a su omega que ya se quería regresar a la casa.

— Si amor mio, veras que al final del día voy a sembrar muchas más cosas — el alfa se resigno, ahora le tocaría continuar hasta que acabara el día para que su omega se sintiera orgulloso de él — pero ahorita quiero descansar

— Mira, te traje mas agua para que tomes, esta fría — saco de la canasta el agua y se la dio a su esposo

— Gracias Jiminie — Yoongi bebió bastante agua, ahora se sentía menos acalorado 

Todos se dirigieron a donde estaba un gran árbol. Allí iban a almorzar porque era el único lugar donde había sombra gracias al árbol, aunque habían muchos más árboles ese en especial era el más grande.

Jimin les dio la comida a cada trabajador  y a su esposo. Todos comieron muy contentos, la comida estaba deliciosa y también agradecian el agua fría que les había llevado el esposo de su patrón. 

Al terminar, pusieron los trastes en la canasta. Jimin se tuvo que despedir de su alfa porque era hora de regresar a su casa. Yoongi le dio un beso y le prometió que se iba a apurar para regresar pronto a casa.

Jimin regreso a su hacienda junto con Taehyung, ya que había invitado al omega menor a almorzar. Al llegar a la hacienda fueron recibidos por las amigas de Jimin.

El omega de la casa les pidió que le sirvieran a Taehyung también. Ambos omegas estuvieron conversando mientras comían y descubrieron que tenían muchas cosas en común.

Al terminar de almorzar. Jimin quizo enséñale el jardín que tenían en la hacienda y también a algunos animalitos que tenia su esposo.

— ¿Eso es un pavo real? — pregunto Taehyung asombrado, jamás había visto uno tan cerca

— Si, es uno de los últimos animales que compro mi esposo — sonrio, le gustaba que su esposo amara tanto los animales tenia un lindo corazón

— Vaya tiene muchos aquí. Pero lo que más me sorprende es que a todos los tiene bien cuidados 

— Mi esposo, tiene tres empleados especiales para limpiar el lugar en donde están sus animales. Los dejan libres a ciertas horas del día, les dan alimento y agua. Además si alguno está mal rápidamente lo llevan al veterinario, para mi esposo sus mascotas son muy importantes — contó Jimin sonriendo

— Que lindo. Tu esposo tiene un buen corazón — suspiro — yo también desearía tener un esposo, pero, creo que eso no será posible

— ¿Por que?, ¿no hay nadie que te guste?

— Si, si hay. Pero creo que mis padres de opondrian al amor que siento por el — agacho su cabeza

— Creo que deberías hablar con tus padres de eso y si se oponen, tendrás que defender el amor que sientes por el. Créeme no hay mejor cosa en el mundo que vivir con la persona a la que amas — sonrio — Taehyung espero que algún día llegues a ser muy feliz con el alfa que amas y también espero que me invites a tu boda

— Claro que si, tu serás el primero en recibir la invitaron a mi boda — Taehyung abrazo a Jimin y sonrio, su hermano era increíble

Los omegas continuaron conversado hasta que Taehyung tuvo que regresar a su casa de había ido por varias horas y sabía que todos estaban como locos buscándolo en especial su madre. Jimin le dijo que podía llegar a su casa cuando quisiera, que no habría problema y Taehyung agradeció mucho eso, era lindo saber que tenia alguien con quien contar.

Las horas se pasaron bastante rápido, la jornada de sembrar se había acabado. Por lo tanto Yoongi regreso a casa, estaba cansado, le dolía todo. Cuando entro a su casa lo primero que hizo fue buscar a su omega, lo encontró en su habitación estaba ordenando su ropa.

Hizo un puchero y corrió a los brazos de su esposo. Jimin lo abrazo y le dio varios besos.

— Me salio una ampolla — fue lo primero que dijo Yoongi y le enseñó su mano a su omega

— Mi pobre alfa, le salio una ampolla a tu manita — dijo Jimin con ternura al ver la carita de su esposo

— Si — el alfa tenia un puchero en sus labios

— Por eso ya no vuelvas a trabajar en el campo amor. No estas acostumbrado y además si sigues trabajando allá, esta ampolla se te va a hacer callo — acaricio la mano de su alfa — mejor quédate aquí en nuestra casita

Yoongi asintió, le haría caso a su esposo. Ya no pensaba volver a repetir el día de hoy ni aunque estuviera muerto, mejor les subía el suelto a sus trabajadores para que ellos lo siguieran haciendo.

— Te haré caso, ya no iré más allá — se separo un poquito — ahora iré a bañarme, porque vengo lleno de tierra y de sudor, ¿me acompañas?

— Por supuesto — Jimin sonrio cuando sintió que su esposo lo agarro de la cintura y empezó a besarlo con segundas intenciones — Yoonie, dijiste que venias cansado, ¿tienes energía para hacerlo?

— Claro que si, ¿quieres?

Jimin asintió con sus mejillas rojitas y sonrio cuando su esposo lo cargo para llevarlo al baño. Primero debían lavarse sus cuerpos y luego tendrían una noche llena de amor, besitos y caricias.

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