Capitulo 58

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Guido:

Dejé que entraran a la que sería su habitación, Renata fue la primera en entrar, se fue directo hacia el ventanal subiendo de rodillas en el sillón admirando la vista que tiene.

Bastian se quedó fuera de la habitación mirándome de reojo, giró un poco quedando de frente.

Bastian: No se te ocurra en lastimar o engañar a Elena, no está sola. No solo tiene a Renata o a mi para defenderla de un juego sucio por parte tuya.

Miré hacia Renata, ella estaba atenta a las palabras de su esposo, se fue bajando lentamente del sillón, dando pasos lentos, pasé la mirada hacia Bastian respirando profundamente.

Guido: Lamento mucho que me tengas en mal concepto.

Bastian: No solo yo, habemos mucho que damos la vida por los nuestros, así como ustedes lo hacen con los suyos.

Renata: Guido…

Bastian levantó la mano evitando que dijera lo que tenía que decir, entré a la habitación, sonreí ante el mismísimo Bastian Bonnet, un gran hombre que de cierta forma lo entendía, él y su esposa han estado por mucho tiempo con Elena, tanto que la han visto triunfar así como estar en sus momentos de mucho dolor. Quedé junto a Renata mirándola.

Guido: Permites que tu esposo Bastian no deje que termines de hablar.

Tragó saliva mirando hacia Bastian, él levantó una ceja no muy de mi agrado, lo había molestado un poco con referirme a su esposa.

Bastian: CON RENATA NO TE ATREVAS.

Guido: CON ELENA NO TE METAS.

Renata: Quieren calmarse los dos…

Bastian entró cerrando la puerta con tanta fuerza, me daba un poco de gracia el hecho que no acepte lo que hay entre Elena y yo, tampoco era agarrarme a golpes a Bastian, aunque ganas no me faltaban.

Bastian: ELENA HA PASADO POR MUCHO. No creas que por ser su supuesto esposo, por que eso de que eres su esposo, esposo… LO DUDO.

Guido: No me interesa lo que tú opines. No te debo nada y tampoco quiero darte explicaciones. La escuchaste, ella misma te lo dijo, de sus labios salió. NO LA OBLIGUÉ A NADAAAAA.

Renata: Bajen la voz… Guido por favor.

Por respeto a Renata necesitaba controlarme, por que Bastian era punto y aparte, sé de los entrenamientos que tienen ellos dos junto con Santino y Nahir, tampoco me pondría la soga al cuello para enemistarnos con Santino, a estas alturas conozco de la fuerza y voluntad que tiene Bastian siendo un hombre completo ante la ley y la mafia, pero él no pertenece a nosotros.

Di un paso, Bastian hizo lo mismo, Renata se interpuso entre los dos, empujaba a su esposo, claro ella sabía que no había manera de ganarme, no tanto por que no me de batalla, Bastian sabe defenderse y para eso lo han preparado, pero aquí frente a él estaba un asesino que para ser sincero, ni que sea Bastian tendría compasión.

Renata: Por favor Bastian.

Bastian: Te lo advierto… una sola lagrima de Elena, te pesará.

Guido: Seré quien se las aparte para seguir disfrutando de su hermoso rostro.

Renata: Guido por favor… deja de provocar a Bastian.

Guido: Deberías aprender a controlar esa ira que te está consumiendo. ¿Qué es lo que te molesta Bastian? Saber que Elena ya no está bajo tu dominio, una Fiscal que te hace ganar muchos millones.

Trataba de apartar a Renata de su camino, pero ella lo sostenía como toda una leona no dejando que su Rey de la selva se me acercara. Reí negando con la cabeza.

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