OCULTO [Rivers & I] 2DA TEMPORADA

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Briana estaba sentada en el banco del parque, esperando a Samantha. La tarde estaba tranquila y el aire fresco parecía contrastar con el torbellino emocional que sentía. Cuando finalmente vio a Samantha acercarse, su corazón dio un vuelco, y la misma mezcla de amor y dolor que había sentido desde su ruptura la invadió de nuevo.

Samantha se sentó frente a Briana, su expresión era una mezcla de ansiedad y arrepentimiento. Comenzó a hablar con una voz temblorosa, su dolor evidente en cada palabra.

—Briana, hay algo que necesito contarte. —Hizo una pausa, buscando las palabras correctas—. Lo que pasó entre nosotros no fue solo por lo que tú creíste.

Briana la miraba con atención, su corazón acelerado ante la promesa de respuestas que habían estado esperando durante tanto tiempo. Samantha respiró hondo, sus ojos llenos de lágrimas.

Recuerdo:**

Unos meses antes, Samantha estaba en su apartamento, preparando todo para un stream importante. El espacio estaba desordenado, con cables y objetos esparcidos por el suelo. Mientras revisaba sus notas, recibió un mensaje de Angie. Abrió el mensaje y vio una foto que la hizo detenerse en seco. Era una imagen de Briana dormida en la cama, semidesnuda, con Angie a su lado en un selfie. El mensaje decía: "Ojalá esto le haga comprender que tú solo estorbas. Tal vez tú seas la novia, pero yo siempre seré su escapada de ti a lo que realmente le gusta."

El corazón de Samantha se hundió. La imagen y las palabras la hicieron sentir como si todo lo que había sido su relación con Briana fuera una cruel mentira. Su mente se nubló de dolor y rabia, y el caos se desató en su apartamento. Los objetos volaban por el suelo y Samantha, desesperada, lloraba desconsoladamente mientras el desastre se apoderaba de su espacio.

Osvaldo, al llegar, vio la devastación y el teléfono de Samantha con el mensaje aún visible. Al ver a su hermana llorando en el suelo, la abrazó, compartiendo su dolor. Verla tan rota por la traición lo devastó a él también, y en ese momento, ambos compartieron el lamento y el dolor.

Al día siguiente, Samantha se armó de valor para enfrentar a Briana. Sabía que sus palabras serían hirientes, pero el dolor que sentía la obligaba a ser dura. En ese encuentro, intentó transmitir toda la furia y el dolor que sentía, aunque su corazón estaba quebrado.
————

El parque estaba tranquilo, pero el ambiente entre Briana y Samantha estaba cargado de emociones encontradas. Samantha había terminado de contar lo que sucedió el día en que rompieron, y Briana la escuchaba con atención, cada palabra de Samantha hacía que su mente viajara de nuevo a ese día confuso. 

—Recuerdo ese día, —comenzó Briana, con la voz entrecortada por la mezcla de emociones—. Habíamos salido a una fiesta, Angie y yo. Todo iba bien hasta que tomé un trago que sabía raro... Después de eso, todo a mi alrededor empezó a sentirse irreal, como si estuviera en un sueño. —Briana hizo una pausa, sus manos temblaban al revivir ese momento—. Perdí la conciencia y, cuando desperté, apenas llevaba puesta la ropa. Angie estaba a mi lado. Cuando le pregunté por qué estaba así, me dijo que yo misma me la había quitado porque decía que tenía calor... pero aseguró que no dormimos juntas.

Samantha la miró con ojos llorosos, sintiendo cómo las piezas del rompecabezas finalmente comenzaban a encajar. La foto, el mensaje, todo había sido una mentira cruel diseñada para separarlas.

—Dios, Briana... —Samantha susurró, su voz quebrándose—. Ahora entiendo cómo consiguió esa foto. Angie nos manipuló a las dos. No puedo creer que haya llegado tan lejos...

Briana asintió, sus ojos también llenos de lágrimas. Sentía una mezcla de rabia y tristeza por lo que les habían hecho. —Ambas fuimos engañadas, Sam. Yo debí haberte contado lo que pasó esa noche, pero estaba confundida, asustada... no sabía qué pensar.

Las lágrimas comenzaron a caer por el rostro de Samantha. —Y yo... yo dejé que mi enojo y dolor me cegaran. Nunca te di la oportunidad de explicar, simplemente asumí lo peor. —Se detuvo, intentando recuperar el aliento entre sollozos—. Lo siento tanto, Briana. No debí haber reaccionado de esa manera.

Briana la miró, sus lágrimas mezclándose con las de Samantha, como si juntas formaran una triste sinfonía de arrepentimiento y dolor compartido. —Yo también lo siento, Samantha. Nunca quise lastimarte. Lo único que quería era estar contigo, amarte como tú me amabas.

Ambas se quedaron en silencio por un momento, el peso de lo que habían perdido y lo que habían sufrido colgando pesadamente en el aire entre ellas. No había palabras suficientes para describir el dolor que sentían, el amor que aún latía dentro de sus corazones pero que ahora estaba empañado por la traición y la manipulación.

—Nos amábamos tanto, —dijo Samantha finalmente, su voz apenas un susurro—. Teníamos algo hermoso y lo destruyeron por un capricho.

Briana asintió lentamente, incapaz de hablar mientras las lágrimas seguían cayendo. Samantha se inclinó hacia adelante, tomando la mano de Briana en la suya. —Sé que no podemos cambiar lo que pasó, —continuó Samantha, su voz temblando—, pero tal vez podamos encontrar una manera de sanar... juntas o por separado, no lo sé. Pero no quiero perderte de nuevo sin intentarlo.

Briana miró sus manos entrelazadas, sintiendo la calidez del toque de Samantha. Había tanto dolor entre ellas, pero también había amor, uno que había sido real y puro antes de que todo se desmoronara.

—No sé qué hacer ahora, —admitió Briana, con la voz llena de vulnerabilidad—. Te amo, Samantha. Creo que siempre lo haré, pero el dolor... es tan profundo.

Samantha apretó suavemente la mano de Briana, una lágrima más cayendo por su mejilla. —Yo también te amo, Briana. Y aunque no tengo todas las respuestas, estoy dispuesta a hacer lo que sea necesario para sanar, incluso si eso significa dejarte ir si eso es lo que necesitas.

Ambas se quedaron en silencio, sintiendo el peso de la decisión que tenían por delante. Sabían que no iba a ser fácil, que sanar requeriría tiempo, esfuerzo y tal vez incluso distancia. Pero en ese momento, al menos, habían comenzado a desentrañar la maraña de mentiras y manipulación que había destrozado su relación.

Finalmente, Briana asintió, apretando la mano de Samantha con fuerza. —Hagámoslo. Intentemos sanar, sea como sea.

Samantha asintió, y por primera vez en mucho tiempo, esbozaron una pequeña sonrisa, aunque fuera una llena de tristeza y esperanza. Se miraron a los ojos, sabiendo que aunque el camino hacia la sanación sería largo, al menos estaban comenzando juntas.

☀️
¿El amor resurgirá para un nuevo comienzo?