𝐂 𝐀 𝐎́ 𝐓 𝐈 𝐂 𝐎 ↝ ᴷᵃⁱˢᵒᵒ

Capítulo 40: Soy tu peor pesadilla

— No hemos vuelto a recibir ninguna amenaza desde que vine a esta casa. —decía JongIn con el teléfono en alta voz—no he visto nada fuera de lo normal, no sé qué demonios está ocurriendo en estos momentos.

— No sé si esto indique algo bueno tampoco, el hombre que enviamos para observar al padre de Insung tampoco tiene noticias relevantes... dice que no le ha visto en ninguna reunión o haciendo alguna visita importante.

— Esto es muy extraño... las amenazas no pararían solo porque sí. ¿Hablaste con Sehun sobre la conversación que sostuvo con JiHoon?

— Sí, dice que simplemente hablaron y le pidió información de con quien se contactaba eso fue todo. —dijo JunMyeon—¿Puede ser que se haya intimidado por la presencia de Sehun?

— No... —afirmó JongIn—dudo que eso haya detenido a Insung. No se detuvo anteriormente con su plan de asesinarlo si no hubiese visto dinero por entre medio.

— No sé qué pensar de todo esto. ¿Por qué no regresas a casa? —le preguntó JunMyeon— KyungSoo no ha mejorado en nada, de lo contrario creo que está más paranoico que antes.

— ¿Sería mucho pedir que le ayudaras a relajarse? No estoy tan seguro de si es una buena idea regresar con ustedes, siento que algo está totalmente fuera de lugar.

— Claro que puedo intentarlo, pero sabes que solo tú puedes calmarlo. No has conseguido nada en estos 4 días que has estado en esa casa, y yo hoy tengo una entrevista de trabajo, no quisiera dejar a KyungSoo solo. —dijo Suho.

— Está bien, estaré allí hoy.

— Bien, le dejaré saber entonces. —dijo JunMyeon—ya me tengo que ir.

JunMyeon cerró la llamada y JongIn guardó su celular en el bolsillo. Volvió a mirar por la ventana de la casa, ¿Cómo era posible que se había detenido luego de haber hablado con el tal JiHoon? Tal vez, el director había cambiado o advertido a los reclusos, pero no debía de bajar la guardia.

Tomó sus llaves, se aseguró que todo estuviera cerrado en casa y entonces volvió a salir. Se aseguraba que nadie estuviera siguiéndole. Condujo rápidamente hasta la casa de JunMyeon, saludó a los hombres que hacían vigilancia fuera, y al entrar Suho ya había partido.

— KyungSoo. —Le llamó mientras se quitaba los zapatos en la entrada.

KyungSoo apareció frente a él en cuestiones de segundos y sin pensarlo se lanzó a sus brazos para besarlo y abrazarlo fuertemente.

— Te extrañé tanto. —dijo sosteniéndole de la barbilla para besarlo apasionadamente.

— Yo tambien. —le dijo dándole una sonrisa.

Lo llevó hasta el sofá donde se besaron más apasionadamente.

— Te extrañé tanto... —volvió a repetirle mientras se abrazaba fuertemente a él.

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— ¿Qué tienes para mí? —preguntó Insung.

— Hemos localizado a su amante. —dijo el informante del otro lado de la línea—le habíamos informado que Kim JongIn se encontraba en el interior de su casa sin embargo KyungSoo no le acompañaba, ahora decidió salir de allí, encontramos que KyungSoo está en otra casa en un lugar bastante privado.

— ¿Qué es eso de bastante privado?

— Es un vecindario de millonarios. —afirmó el hombre—un acceso limitado y a pesar de eso, pudimos ver la casa desde lejos, se encuentra resguardado por varios hombres.

— ¿Saben quién es el propietario? —preguntó Insung mirando a JiHoon pasar algunas hojas sentado en su escritorio.

— No, no sabemos. —dijo—escuchamos que la casa fue comprada por un hombre millonario, pero no sabemos quién es.