Cuando el corazón habla [✔]

SEIS

CAPITULO 6

"UN RESPIRO DE CÁLIDEZ"

Hoy me desperté de muy buen humor, algo realmente extraño para mí. El simple hecho de tener una nueva amiga en la escuela me daba una sensación de calidez que no había experimentado en mucho tiempo. Quizá podría invitar a Adriana a almorzar en mi casa algún día. Aunque me preocupaba un poco si le gustarían los bocadillos de jamón y queso que prepara mi abuela. A mí me encantan, especialmente cuando el queso realza el sabor del jamón. Dejé el plato a un lado y tomé mi celular en las manos. Al leer el mensaje de Adriana, casi me atraganto con mi comida.

Adriana:

¡Por cierto! Le hablé de ti a mi padre y te quiere conocer.

Viernes, 3:20 AM

Mi mente comenzó a girar a toda velocidad. ¿Qué quería decir Adriana con eso? ¿Cómo reaccionaría su padre al conocerme? ¿Sería alguien exigente? Las preguntas y dudas se acumularon en mi cabeza, y el entusiasmo que sentía por la mañana se empezó a difuminar. Pensé en Adriana, en cómo su amabilidad había sido un rayo de sol en medio de mis días grises. Era difícil creer que alguien como ella, con todo el mundo a sus pies, quisiera tener algo que ver conmigo. La invitación de conocer a su padre parecía un paso significativo, pero no pude evitar sentirme un poco nerviosa. ¿Cómo me vería él? ¿Qué pensaría de mí?

Me recosté en mi cama, mientras la canción "We Don't Have to Dance" de Andy Black comenzó a sonar en mi mente. La letra hablaba de liberarse de las expectativas y encontrar una forma de ser auténtico en un mundo lleno de presiones.

-We don't have to talk.- Me repetí a mí misma, intentando calmar mis nervios. Me preguntaba si Adriana había hablado con su padre sobre mí en términos positivos, o si simplemente era una formalidad. La idea de ser juzgada me causaba cierta ansiedad. ¿Qué pasaría si no lograba cumplir con las expectativas?

We don't have to dance

We don't have to smile

We don't have to make friends

It's so nice to meet you

Bottles smash, I raise my hand

How can you all even stand it

Why is there joy in this poison?

Suspiré profundamente y me preparé para enfrentar el día que me esperaba. Tal vez la mejor manera de manejar esto era simplemente ser yo misma, sin dejar que la presión me dominara. Aunque, en el fondo, deseaba que todo saliera bien y que, quizás, esta fuera una oportunidad para demostrar que no solo era una chica de bajo perfil, sino alguien que valía la pena conocer. Decidí enviarle un mensaje a Adriana para coordinar y prepararme para lo que estaba por venir, estaba realmente nerviosa, jamás me había presentando hacia alguien adulto. Mientras tanto, me perdí en mis pensamientos, dejando que la canción resonara en mi mente y me diera un poco de consuelo.

Esperé que Adriana me respondiera, pero no pasó mucho tiempo antes de que mi celular sonará, indicando que era ella.

Adriana:

¡Hola, Melissa! ¿Te gustaría hacer una videollamada ahora? Así te presento a mi papá.

Sentí un pequeño escalofrío de anticipación. Acepté la videollamada y pronto la pantalla de mi teléfono se iluminó con la cara sonriente de Adriana. Mis nervios estaban a flor de punta, mi corazón palpitaba demasiado.