—Gracias —murmura Sasuke, sus sharingans de color rojo sangre brillan en la oscuridad de la habitación y se deslizan lentamente por mi rostro. Su nariz está apoyada contra mí y se mueve tan lento como sus ojos, de un lado a otro contra los míos. Es la única parte de sí mismo que deja que me toque a pesar de los recientes acontecimientos que tuvieron lugar entre nosotros.
Ambos estamos acostados bajo mis sábanas, la tela negra es lo único que nos cubre a los dos. Sasuke sigue goteando de mí, prometiendo manchar mis sábanas, pero no me importa. No quiero levantarme y romper el pequeño momento que tengo con él. Han pasado años desde que hemos tenido un segundo a solas, mucho menos una noche entera. ¿Cuánto tiempo ha pasado? ¿Tres o cuatro años? No tengo la energía para resolverlo.
Es extraño que el hecho de haber estado separados tanto tiempo no haya roto nuestro enamoramiento mutuo. También es extraño lo rápido que conectamos de esa manera. Lo rápido que rozó sus labios con los míos, lo rápido que metió sus manos debajo de mi camisón, lo rápido que se arrodilló en el suelo para complacerme.
—Debería agradecerte —murmuro, mis ojos bailan sobre su piel pálida, extrañando el suave rosa que tenían hace unos momentos.
—No tienes que agradecerme —susurra Sasuke, inclinando la cabeza para que sus labios rocen los míos—. Feliz decimoséptimo cumpleaños, amada —murmura antes de apoyar completamente sus labios contra los míos. Todavía están manchados con mi sabor, un poco amargos, pero no parece importarle.
En todo caso, parece disfrutarlo, lo que se demuestra aún más cuando se aleja de mí. Su lengua se desliza por su labio inferior mientras sus ojos se apartan de mi rostro y vuelven a bajar hacia mis pechos. Los ojos de Sasuke parecen brillar más a medida que su vista avanzada tropieza con cada centímetro de piel expuesta.
—Déjame regalarte algo más —me susurra mientras desliza sus manos bajo las sábanas y agarra rápidamente mi muslo—. Si así lo deseas, amada.
"¿Por favor?"
Una sonrisa se dibuja en su rostro y la arrogancia desaparece de inmediato. "Lo que la cumpleañera desee", murmura, sumergiéndose bajo las sábanas y flotando entre mis rodillas.
—¿Quedarte? —pregunto lentamente, mientras mis manos se tambalean para encontrar su cabello, envolviéndolo alrededor de los mechones de color cuervo.
Sasuke levanta la cabeza de golpe, la manta se cae sobre mí y termina en su espalda. La dulzura de su rostro desaparece y es reemplazada por la expresión pétrea que suele tener. "No".
Inclino la cabeza hacia atrás y miro al techo mientras mis ojos parpadean rápidamente, tratando de contener las lágrimas. "¿Por qué?", pregunto, tratando de mantener la voz firme.
Sasuke se arrastra por mi cuerpo, sus labios besan lentamente mi estómago durante todo el camino. "Sabes por qué", susurra contra mi cuello, terminando el corto camino hacia mis labios. Su nariz se posa sobre la mía nuevamente, sus ojos deslumbrados por mí. "No llores, amada", susurra, besando las lágrimas que se derraman por mis mejillas. "Disfrutemos nuestra noche. Deja de llorar por mí, simplemente disfruta lo que soy capaz de ofrecerte".
—Está bien —suspiro, mi voz tiembla con esa única palabra—. Te amo.
"Lo sé."
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"No puedo. No puedo. ¡No puedo hacer esto! ¡No puedo hacer esto!" grito, mi cuerpo destrozado por el dolor. Siento como si me estuvieran partiendo en dos, cada centímetro de mi cuerpo me grita que pare.
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Traducciones Naruto 2
FanfictionNada de esto es mio, creditos a sus respectivos autores