Capítulo 30

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CARISSA

La luz de las velas ilumina el enorme comedor, flores de todo tipo decoran el centro de la mesa, la comida se ve deliciosa, parece una obra de arte, todo sería perfecto si la persona al frente mío no estuviera aquí.

Cada detalle es perfecto. Las velas, las flores, todo parece sacado de un sueño.

Trato de concretarme en cualquier detalle que me rodea para evitar escuchar a mi prima quien no deja de hablar.

-Siempre lo he dicho, tuve tanta suerte de casarme por amor. No como otras 'pobres mujeres que tuvieron que recurrir a un matrimonio por conveniencia. –Dijo Beatriz con la mirada fija en mí.

Ruedo los ojos antes de concentrarme en mi comida.

No hacía falta que me viera, sabía que se refería a mí, evite mirar alrededor porque estaba segura de que toda la mesa entendió la indirecta.

Estoy a punto de levantarme cuando siento una presión suave en mi pierna, volteo y es Xander dándome una pequeña sonrisa que devolví sintiendo un cálido apoyo.

Beatriz nota el gesto de mi esposo y molesta quiere que todos los ojos de la mesa estén puestos en ella.

-Miren este hermoso collar que mi querido Charles me regalo, ¿No es precioso?

Todos en la mesa la alabaron como de costumbre, de reojo vi a Charles que estaba a punto de enterrar la cara en el plato.

Cansada de la conversación, decido retirarme.

-Disculpen, no me siento bien, iré a descansar un momento.

Mi esposo se levanta rápidamente y me ayuda a ponerme de pie.

-Te acompañaré.

Negué con la cabeza, aún era muy temprano, Xander va a la cama hasta muy tarde, no tenía la intención de que se aburriera a mi lado.

-No, por favor, disfruta la cena. Aún no sirven el postre. –dije mientras avanzábamos por el pasillo.

Pero él insistió, estaba a punto de aceptar su compañía cuando Charles se unió a nosotros, haciendo que ambos dejemos de hablar.

-Xander, podría hablar contigo. –Su nerviosismo era evidente, no es para menos, después de la última vez que nos vimos, me sorprende que se atreva a dirigirle la palabra.

Xander estaba a punto de negar, entonces tomo su brazo para atraer su atención a mí.

-Estaré bien, solo tomaré una siesta.

Me miro enfadado, sé que su furia no iba dirigida a mí, por lo que sonreí antes de marcharme a la habitación.

-Hablemos afuera. –Miro a Charles antes de volverse hacia mí. –Pronto iré a la habitación a verte.

Asentí mientras toda la familia continuaba disfrutando la cena.

Xander camino hacia la puerta que da al jardín sin esperar a Charles, parece que al esposo de mi prima no le molesto su actitud porque lo siguió como un perro sin protestar.

Camino por el pasillo aliviada de dejar toda la tensión en el comedor, es largo y estrecho, por lo que el sonido de las voces en el comedor se alejaba de mis oídos a medida que mis pies avanzan.

No pudo evitar tocar mi vientre mientras los recuerdos me invaden.

Solía esconderme detrás de la cortina al final del pasillo, pasaba horas bajo la pesada tela esperando el momento que alguien me encontrara, pero nadie me buscaba, Emma prefería la compañía de sus muñecas que la mía.

Señorita DaftDonde viven las historias. Descúbrelo ahora