CARISSA
Abro los ojos de golpe.
Quiero pensar que todo había sido una pesadilla, pero mis ojos viendo fijamente el techo me dicen que no.
Esta no es mi habitación, el techo en el que están enfocados mis ojos tiene el mismo diseño que el de la habitación de Leonor.
Con cautela observo a ambos lados.
Estoy sola, nadie durmió a mi lado, Xander no regreso anoche.
Pase sola mi noche de bodas.
Mis ojos se empañaron al pensar en él, madre no debió hacerlo.
Puedo imaginar las burlas de la sociedad, puedo aceptarlas, estoy acostumbrada, pero no Xander, él siempre ha sido aceptado por ellos, debe estar pasando un mal momento debido a mi causa.
Ahora él será blanco de burlas gracias a estar casado conmigo.
Me levanto lentamente, mi estómago cruje, debió haber pasado la mañana por la luz que entra por la ventana.
Normalmente, desayuno temprano es normal que tenga tanta hambre a esta hora.
Acomodo la falda de mi vestido, dormí con el puesto, mis manos no pudieron desamarrar el corsé.
Simplemente, me rendí así que decidí dormir así.
Lo intento de nuevo.
Estiro mis brazos lo más que puedo para quitar las cintas, lo intento nuevamente hasta que la puerta se abre dejándome paralizada.
No volteo a ver de qué se trata, pero solo una persona podría entrar sin tocar.
Cierro los ojos cuando toma mi cabello dejándolo a un lado de mi cara.
El contacto me genera un escalofrío a través de toda mi columna vertebral.
Quito mis manos de mi espalda para evitar que veo mi piel erizada gracias a él.
Con delicadeza desata las cintas hasta que tengo que sujetar el vestido para evitar que se caiga.
Suspira antes de apartarse de mi lado.
-Come algo. –Menciona antes de salir.
No puedo estar segura, pero bebió mucho, el olor no pasa desapercibido aun estando a una larga distancia.
Cuando estoy a la mitad de las escaleras puedo escuchar la conversación de ahora mi nueva familia.
Todavía no estoy segura si viviremos aquí o es temporal.
Cierro los ojos por un momento antes de terminar mi recorrido.
Nunca había sentido algún tipo de incomodidad en esta casa, no pensé que lo haría.
Podría haber imaginado cualquier escenario con Xander, pero este no es uno de ellos.
-Buenos días. –Digo al entrar en el salón.
Todos se quedan en silencio hasta qué lady Birdwhistle me saluda y sonríe como siempre.
Leonor se mueve para sentarse a mi lado.
La señora Birdwhistle niega con la cabeza y me muestra mi lugar junto a una silla vacía.
Mi ahora cuñada se indigna unos segundos antes de volver a su sitio.
Le devuelvo la sonrisa antes de tomar mi lugar.
Pasan unos minutos mientras comemos y hablamos como si no hubiera pasado nada ayer.
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Señorita Daft
RomanceCarissa Daft fue obligada a casarse con el hombre del que siempre ha estado enamorada después de que él la rechazara delante de sus amigos. Escribí esta historia inspirada en un libro que me gusta mucho. Lamento los errores ortográficos, no me juzg...