Capítulo 22

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CARISSA

Veo a Emma bailando en el centro de la pista, es el centro de atención debido a sus rápidos movimientos con el propósito de llamar la atención.

La sala de baile estaba abarrotada, los candelabros destellaban luz sobre los vestidos, lo que hacía parecer que nos encontrábamos rodeados de estrellas.

Hermosos vestidos adornaban los cuerpos de las mujeres y los caballeros portaban trajes impecables.

La música flotaba por los alrededores, se mezclaba con las risas y los susurros.

La decoración era exquisita, el aroma de las flores frescas recorrió mis fosas nasales.

Mi madre está a mi lado como de costumbre, pero esta vez era diferente porque no hemos hablado desde nuestra confrontación.

Una intensa mirada hace que mi atención se dirija a la pista, miro a Leonel observarme de reojo a pesar de estar al lado de mi hermana, su mirada me incomoda.

No ha dejado de detallarme desde que entre del brazo de Xander, evito a toda costa pararme en su dirección.

Si las miradas de Emma fueran dagas ya me habrían atravesado desde hace mucho tiempo, mira a su prometido y luego me mira a mí.

Desde donde está detalla el collar que tengo puesto e inconscientemente mi mano enguatada lo toca, lo que hace que mi hermana enfurezca.

Está celosa del collar, el señor Potter no le ha dado ningún regalo además de su anillo de compromiso a pesar de estar a próximos a llegar al altar.

No es su primer matrimonio, por lo que debería estar consiente que es solo un acuerdo que beneficiara a ambas partes.

El señor Potter necesita a una mujer para qué crie a sus hijos y Emma necesita un esposo que la mantenga a ella y a sus hijos ahora que es viuda, una mentira que mi madre ha esparcido por toda la ciudad porque el esposo de Emma fue visto no hace mucho tiempo en una ciudad al norte con una mujer joven.

Su compromiso ha sido por conveniencia, no por amor.

Terminan de bailar y noto las miradas de los presentes puestas en mi hermana, se dedicó a alzar la mano para que todos pudieran admirar su anillo de compromiso con una falta total de sutileza.

Los gestos de desaprobación me hicieron sentir avergonzada por la falta de decoro de Emma.

A mitad de la velada ambos se dirigen a nuestra dirección, me coloco detrás del cuerpo de Xander, no nota mi movimiento porque está conversando animadamente con el conde de Derby.

El señor Potter se para frente a mí y me lanza miradas lascivas cuando Xander no está viendo.

-Eres la mujer más hermosa de esta sala. –Susurra en mi oído al pasar a mi lado. –Trago saliva y volteo a ver a mi hermana quien claramente lo escucho.

Madre llama a mi hermana a su lado, quedando a unos pasos del canalla, trato de alejarme, pero el habla antes.

-Antes de que él te llevara al altar, yo estaba dispuesto a luchar por tu mano. –Inclino su cabeza para evitar que Xander lo escuchara, pero aprieto la mano de mi esposo y este se gira de inmediato, al verlo me pega a él haciendo que cambie de lugar.

-Me encantaría bailar con mi futura cuñada. –El pánico me invade, Emma me mira mal desde donde está, quiero negarme, pero sería inapropiado.

Pasa su lengua por sus labios y estoy a punto de vomitar.

Coloca su mano para que la tome y me tardo algunos segundos en reaccionar.

-En otra ocasión, mi esposa ya tiene un compromiso para este baile.

Señorita DaftDonde viven las historias. Descúbrelo ahora