Blood

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N.A: nuevo capítulo, que lo disfruten. Los leo en comentarios, saludos!

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Se sorprendió de ver una nota saliendo de su chimenea de parte de su madre, que simplemente decía "Mañana a primera hora quiero que tengamos una reunión en mi oficina, es importante" sinceramente no pudo dejar de pensar toda la noche que demonios podría haber hecho para que Minerva quisiera tener una conversación con ese nivel de urgencia a una hora tan temprana, se distrajo un momento dejando caricias en la espalda de su castaña, sintiendo su suave respiración y los lentos latidos de su corazón que indicaban que nada estaba perturbando su sueño.

- A veces desearía poder volver a dormir otra vez, simplemente por tener el placer de despertarme mirando tu rostro – vio una pequeña sonrisa en Hermione, y aunque, sabía que no la había escuchado quiso pensar que sí

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A pesar de que hacía mucho tiempo que no podía dormir como los demás, al estar recostada junto a la castaña había aprendido a disfrutar de cerrar sus ojos dejándose llevar por sus pensamientos, aunque ahora se sentía bastante intranquila pues no tenía idea de que había hecho mal para que su madre tuviera tanta urgencia en tener una reunión a esas horas de la mañana. De un momento al otro, no pudo evitar la sorpresa de sentir besos en su cuello y la mano de su castaña acariciando su abdomen con suavidad, se derritió en sus brazos con su corazón latiendo más rápido de lo normal.

- Buenos días, amor – la voz ronca y susurrada de su castaña estremeciendo completamente su cuerpo

- Buenos días, cariño – acarició su espalda con suavidad sintiendo su piel erizándose – tenía pensado dejar que durmieras un poco más

- Te sentía bastante inquieta, amor – levantó su mano para acariciar con suavidad su mejilla – estabas moviéndote mucho ¿Qué ocurre?

- Mi madre envió una nota en la noche diciendo que tenía que hablar conmigo con urgencia temprano en la mañana – la miró disfrutando de sus caricias – y estoy un poco preocupada porque no sé si hice algo mal o que

- No has hecho nada malo, amor – se acercó dejando un suave beso en sus labios – seguramente tenga que solucionar algo antes del desayuno

- Espero que sí – llevó sus manos para acariciar su espalda desnuda - ¿quieres ducharte conmigo?

- Ahora mismo – se acercó dejando una pequeña mordida en el lóbulo de su oreja – quiero que me hagas ver las estrellas a pesar de que el sol está en alto

Al separarse momentáneamente de su rostro, no pudo evitar reparar en sus pupilas dilatadas y honestamente no había nada que amara más que complacer constantemente a su esposa en lo que sea que le pidiera, así que la recostó colocándose encima de su cuerpo dejando besos y caricias por cada centímetro de su cuerpo. Sonriendo y enseñando sus colmillos al sentir las reacciones de su cuerpo, el cómo se aceleraba su corazón y su respiración se entrecortaba por toda la situación, no detuvo sus caricias hasta escuchar que gemía su nombre con fuerza apretando sus uñas en su espalda.

- Val...te...te amo... – la castaña se desplomó completamente en la cama matrimonial que compartían cerrando sus ojos disfrutando de las caricias

- Te amo, cariño – sonrió dejando pequeños besos en sus mejillas

Hermione tenía toda la intención de dar vuelta la situación y acariciar a su esposa hasta enloquecerla, morder cada parte de su cuerpo, pero fue interrumpida por una nueva nota que salió de la chimenea, un recordatorio de Minerva que no podía llegar tarde a su reunión, incluso antes del desayuno. Giró los ojos con un poco de molestia, pues no entendía cual era la urgencia y necesidad de hacerlo tan temprano pues no tenía clases hasta media mañana.