✨✨La inevitable danza de los dragones de una joven.✨✨

🐉Capitulo: 30🐉

—En realidad no le pagan lo suficiente para desempeñar el papel de superiora dura con un corazón bondadoso, pero evitar que su propia carga de trabajo aumente es otra razón para que Tanya entrene a Grantz para que sea alguien a quien pueda usar, por lo que lo anima con un  Cuento contigo. —De la Saga de Tanya la Malvada Vol. 4

Joffrey estaba acostado en la cama, agradablemente exhausto después de su tiempo con Laenor.

—Hmm, ¿te sientes mejor?

—Laenor se estiró y le dio un beso—. Sí, tienes una forma de calmar mis preocupaciones.

—Bueno, no estaría bien que la 'Tormenta Oscura' se desanimara con una conversación casual con su buena hermana.

Laenor gimió y golpeó a Joffrey con su almohada.

—Bueno, me  distraje  de eso.

—Joffrey se rió—. Es su dragón el que es temible, y todo lo que estabas haciendo era hacer una recomendación. Hablando de eso, ¿a quién sugeriste?

—Yo elegí a Ser Medrick. No tengo nada contra él, pero Puerto Blanco está bastante lejos —respondió Laenor—.

Sigo pensando que exageras los peligros. ¡Una vez, una vez, ella se descontroló, para beneficio de tu casa! Y desde entonces, andas con pies de plomo como si estuviera a punto de llevar a cabo una masacre. No te vería tan angustiado y ansioso cada vez que la vieras.

Joffrey prefería que Laenor estuviera despreocupada y feliz que preocupada perpetuamente por algo que probablemente nunca ocurriría.

—¡No lo entiendes! Joffrey, mi amor, lo que hizo debería haber sido imposible. Seasmoke y Caraxes estaban en los Peldaños de Piedra, y no pudimos desalojar a la Triarquía. ¡Ella  brutalizó  a la Triarquía  y  a Dorne! Me manipuló y no me dejó otra opción que encubrir sus acciones. ¡Antes de que floreciera! ¡Era una niña!

Laenor se incorporó de la cama, luego se puso de pie y comenzó a caminar de un lado a otro.

—¡Y luego regresa sin dar ninguna pista de que masacrar a cientos, si no miles de personas, la molestó en lo más mínimo! Si no supiera la verdad, nunca, ni en diez mil años, creería que es capaz de eso. ¡Es Maegor encarnada en la forma de una niña! —Joffrey

suspiró. No era la primera vez que su amante hablaba así—.

Pero es tu pequeña Maegor. ¡Ves cuánto aprecia a su hermana, tu esposa! No tienes nada que temer de ella. Nunca te ha amenazado con daño físico, solo con compartir lo que ocurrió. ¿Eso no te dice algo? Tal vez enmascare bien sus verdaderos sentimientos. Fue criada en la corte, tal vez sienta horror por lo que ha hecho. Si nunca ha tomado otra vida desde entonces, ¿no es eso suficiente para aliviar tus miedos?

Laenor inclinó la cabeza. —Tal vez tengas razón. En cualquier caso,No me arrepiento de mi sugerencia, aunque dudo que la acepte. Rhaenyra cree que Puerto Blanco no es un lugar adecuado para ella.

Joffrey tenía curiosidad. —¿A quién crees que elegirá?

—Laenor se rascó la barbilla—. Mmm, bueno, si te equivocas con ella, elegirá a Lord Baldric. Y podríamos esperar ver a nuestro vecino del sur en llamas. —No

creo que sea él. Mi plata estaría en Hamish o Ser Kevan. Esos dos tienen mentes agudas y encajan mejor con su enfoque financiero.

—Tal vez... aunque esa es otra rareza sobre ella. No nos dimos cuenta antes, pero aparentemente, ella es la mente maestra detrás del Banco del Dragón. No solo la idea, sino también su funcionamiento. Lord Beesbury simplemente está dando su sello de aprobación —respondió Laenor.